NoticiaX Tantos El anuncio del Evangelio, inversión prioritaria Rueda de prensa con motivo del Día de la Iglesia Diocesana 2015 · Autor: S. FENOSA Publicado: 12/11/2015: 9488 De la mano de la Vicaría para Asuntos Económicos, respondemos a algunas de las preguntas frecuentes sobre el origen y el destino del dinero que se da a la Iglesia. ¿Qué criterios se tienen en cuenta a la hora de autorizar o no autorizar una obra? Los criterios son: pastorales, de urgencia y económicos. Los pastorales marcan la necesidad de la obra para el anuncio del Evangelio, mirando al futuro. Todas las obras planteadas son necesarias, pero hay que tener en cuenta dos valoraciones importantes: la urgencia (no es lo mismo un tejado en riesgo de derrumbe que la adecuación de una sala) y el económico (los recursos son limitados, lo que hace necesario una jerarquización en las mismas que se intenta plantear con la mayor objetividad posible). Otro criterio es el legal, las llamadas órdenes de ejecución. Ante la situación de riesgo de un inmueble, el ayuntamiento de una localidad exige la reparación del mismo urgentemente, si no se acometiera la obra, conllevaría una sanción económica. ¿Quién decide qué obras se realizan? La tramitación de una obra comienza con la decisión del párroco, en unión al Consejo Parroquial. Dicha propuesta se lleva al arciprestazgo, donde se hace una reflexión sobre la idoneidad de la misma. Después se envía al Consejo de Asuntos Económicos (CAE), un organismo que aconseja al Sr. Obispo y a la Administración Diocesana sobre la necesidad o no de la misma. Dicho consejo está formado por un grupo de profesionales de distintas materias: económicas, legales, etc., se trata de un Consejo independiente. Una vez emitido el informe, se realiza una proyección de las obras a realizar, de la idoneidad y de la urgencia, etc. Es una gran inversión la destinada a las obras, ¿es también una inversión en puestos de trabajo? Claramente sí. Es difícil calcular cuántos puestos se han creado y mantenido, porque habría que ir obra por obra estudiando los puestos directos y los puestos indirectos que suelen ser más numerosos. Lo que está claro es que, en tiempos difíciles, los cristianos, con su generosidad, para el sostenimiento de la Iglesia han creado y mantenido muchos puestos de trabajo. Y muchas familias pueden mantenerse gracias a ello. ¿Qué porcentaje de los presupuestos se utiliza para obras? La Diócesis de Málaga, en el año 2014, ha invertido más de 7.700.000€ en conservación y rehabilitación de templos, lo que supone el 42% del presupuesto. Otro 33% se destina a actividades pastorales y el resto en retribuciones del personal seglar y sacerdotal. ¿De dónde proviene el dinero para las obras? De las aportaciones de las parroquias, es decir de las aportaciones de los feligreses. Esto es enviado al Fondo Común Diocesano desde el que se cubren dichos gastos. Este año insistimos en la necesidad de que los cristianos malagueños se animen a tener una cuota con la parroquia, porque esto permite a la Diócesis tener previsiones de ingresos y poder hacer frente a las necesidades. Funcionamos como una familia en la que todos aportamos para repartir después con los hermanos más necesitados. Es la economía de la fraternidad. Un ejemplo concreto, ¿qué criterios avalan la idoneidad de las obras en el Seminario y la Casa Diocesana? El edificio del Seminario tenía unos daños estructurales que requerían una intervención en el edificio por el riesgo de colapso (derrumbe) del mismo, existe un informe muy detallado de la situación en la que se encontraba. Este edificio está protegido por lo que hay que restaurarlo conservando fachada y otras características interiores (lo que hace que sea más costoso). A su vez necesitaba ser adecuado a las nuevas normativas y necesidades de la diócesis, por lo que se vio necesaria su rehabilitación para un mejor servicio a la Iglesia de Málaga. Se consultó al Consejo del Presbiterio, que dio su visto bueno; al Colegio de Consultores, y por último se solicitó una autorización a la Santa Sede. Todos dieron el visto bueno al ser algo muy necesario pastoralmente. ¿Qué otros fines tiene el dinero que se recauda con esta campaña? ¿Sólo se atienden las obras? Es verdad que las obras siempre son lo más llamativo, pero esta campaña es también una oportunidad para recordar que somos Iglesia, que podemos hacer entre todos que nuestra Iglesia de Málaga sea una Iglesia en misión, como nos invita el papa Francisco. Sabernos parte de la historia de nuestra parroquia, de nuestra Diócesis y de toda la Iglesia Universal y que, entre todos, debemos seguir escribiendo la historia de la salvación que Dios ha comenzado en cada uno de nosotros y en toda la Iglesia. Una vez que se toma conciencia de esta pertenencia a la Iglesia, viene la campaña económica. Recordamos, además, que las cuotas a favor de la parroquia desgravan desde un 35% hasta un 75% de lo aportado dependiendo de las cantidades. Todo esto es poner un pequeño grano de arena para hacer más fácil el anuncio del Evangelio. Hay que dar las gracias a tantas personas que cada día contribuyen con su ayuda a que la Iglesia siga haciendo posible el anuncio del Evangelio.