Los malagueños hemos tenido la gran alegría de recibir y de tener entre nosotros al obispo misionero de la Consolata, D. Francisco Lerma Martínez. D. Francisco está ejerciendo su labor pastoral como obispo en la Diócesis de Gurué, Mozambique, y ha querido visitar nuestra Diócesis. 

Con gran alegría, la delegación de misiones ha recibido su presencia como una pequeña animación misionera que nos ha refrescado y animado a continuar sembrando la semilla de la misión en el corazón de los malagueños. 

Quiero resaltar la presencia del obispo misionero D. Francisco en el Seminario Diocesano, donde celebró la Eucaristía con nuestros seminaristas, animándoles en la homilía a seguir estrechamente a Jesús misionero y estar dispuestos a dar la propia vida por él con total disponibilidad. Después de la cena, los seminaristas le hicieron varias preguntas concernientes a su misión en Mozambique y su presencia ayudó a sentir más de cerca la misión. 

D. Francisco también visitó Cáritas Diocesana y agradeció una ayuda que ha recibido para su misión. Compartió con los miembros de Cáritas y nos dejó también su impronta misionera. Finalmente D. Francisco compartió con los laicos Misioneros de la Consolata, a los que animó a continuar siendo misioneros también aquí en nuestra Diócesis y dando testimonio misionero en el trabajo, en nuestros barrios y en nuestras familias. Gracias D. Francisco por ayudarnos a recordar que todos somos misioneros y por tu testimonio de entrega y generosidad en la misión de Gurué, Mozambique.