NoticiaColaboración Cofrades, a la calle Publicado: 25/09/2021: 8730 Emociona toparte con la verdad última del ser. Ocurrió el domingo 19 de septiembre. Siete de la mañana. Calle Vendeja en Málaga. La imagen de Cristo, redentor del mundo, retornaba a las calles junto a otras 12 imágenes más. Málaga en silencio, autobuses transportando en la mañana del domingo a más usuarios de lo habitual, oraciones que salpicaban el centro. Impresionante imagen de la Piedad entrando en Catedral precedida por el Cristo de la Agonía. Aquel sábado fue un día significativo en lo que a devoción sentida se refiere. El silencio acompañaba el transcurrir de los sagrados titulares por Málaga. Lejos del bullicio al que nos acostumbra la Semana Santa. Lo de ayer fue de nota. Emocional y teológicamente hablado. Popular y religiosamente, expresó el cariño de los fieles a las distintas advocaciones de Cristo o María, trasladadas en andas. La vuelta a las calles de las procesiones, se hizo bien. Con sentido común. Y generó algunas reflexiones. Quien estaba inquieto por la falta de culto público a los sagrados titulares ¿seguirá con la misma inquietud por dar culto público a Dios con su vida cristiana? Si es afirmativo me alegro. Es necesario ser coherentes. Precisamente en esta dirección, es necesario seguir cuestionándose. ¿Es necesario volcar tanto patrimonio a las calles si con unas ligeras andas el pueblo arropa a los sagrados titulares? ¿Sin espectáculo soberbio para los sentidos se alimenta la fe del pueblo? ¿Vincular, a la luz de la oración, una potentísima acción social a las hermandades sustituiría la imparable carrera de adquisición patrimonial? Valorando el buen hacer cofrade, salgamos de nuestros estrechos claustros para seguir creciendo como cristianos porque ayer una cuestión ya quedó despejada: uno de los grandes aciertos de las hermandades y cofradías es que propician el encuentro con Cristo. Algo impresincible para alimentar la fe cristiana. Artículo publicado originalmente en Diario SUR