NoticiaSalud Antonio Quintero, enfermero de recuperación Antonio Quintero Publicado: 12/02/2021: 15063 Día de la Enfermería Antonio Quintero es enfermero en la Unidad de Recuperación Postquirúrgica del Hospital Regional Universitario de Málaga, además de trabajador de Cáritas en el centro "Calor y Café" para personas sin hogar. Está viviendo la lucha contra el Covid en primera línea. ¿Cómo ha cambiado vuestro trabajo el Covid? Con el covid mi tarea ha cambiado principalmente en mantener y aumentar las medidas de seguridad frente al posible contagio entre el personal y los pacientes. Para los pacientes ha supuesto disminuir la posibilidad de tener más visitas de sus familiares. También se ha modificado en determinadas épocas de saturación de camas ocupadas en la UCI porque hemos atendido a pacientes propios de estas unidades y que hemos tenido que atender además de los pacientes quirúrgicos propios de nuestra unidad. Un año después de que todo empezara, la tercera ola ha desbordado a todos. ¿Está más preparado el sistema sanitario? ¿Y vosotros? Las nuevas olas están desbordándonosy añadiendo el problema de saber que esto iba a pasar. Y me atrevería a decir que volverá a pasar más adelante, aunque ojalá me equivoque. Hay más equipamientos de protección ahora (mascarillas, EPIs,etc.), más conocimiento de la propia enfermedad en general. ¿Cómo se prepara un profesional para hacer frente a una pandemia de estas dimensiones? No hay preparación. No se le esperaba ni en sueños. Lo que es cierto es la conciencia de grupo y colaboración entre todos los profesionales para cuidar a los pacientes. Eso es indudable. Nos tenemos los unos a los otros. Se habla mucho de la sobrecarga laboral pero ¿y la emocional? ¿Cómo se puede llevar esto adelante psicológicamente? Porque estáis en contacto diario con muchas situaciones de dolor. La sobrecarga de trabajo y emocional se acumula y en algunas casos también se somatiza en algunas compañeras. Se sobrelleva interiormente y también hablando entre nosotros, aunque a veces no hay ni tiempo para ello. Es un poso que con el tiempo se hará notar seguramente. ¿Qué momentos han sido los más difíciles y cuáles los más satisfactorios? Momentos difíciles cuando no puedes acudir a varios cuidados a la vez, porque se trata de personas enfermas y que tiene dolor de todo tipo. Y además de las personas enfermas están las familias que están a varios metros detrás de la puerta y que se haría preciso aumentar los canales de comunicación entre ambos lados de esa puerta porque sufre el paciente que está dentro y sufre la familia que está fuera. Esa es una tarea pendiente de antes y de ahora. Momentos satisfactorios son especialmente cuando los pacientes evolucionan favorablemente y pueden marcharse. ¿Cómo os ayuda la fe? ¿Compartís vuestra experiencia cristiana con los compañeros o los capellanes? No hay manifestaciones cristianas de fe entre los compañeros. Aunque a veces no hay que evidenciarlas explícitamente porque de igual modo se manifiestan por sí mismas. En marzo os arropamos con los aplausos. Hoy, si tuvierais que dar vosotros un mensaje a la sociedad, ¿cuál sería? Diríamos que seamos todos responsables porque tener saturado el sistema de salud conlleva que muchos enfermos se vean con sus revisiones retrasadas, sus operaciones retrasadas, etc. Y el número de personas afectadas no es sólo los pacientes con covid, si no que otros muchos pacientes también sufren con sus patologías. Si hubiera conciencia se podría evitar. Al igual que no deberíamos hablar de número de olas si fuésemos responsables y poner los medios para evitar gran número de contagios.