NoticiaCuaresma "Partir la vieja", una fiesta en mitad de la Cuaresma Comida típica del "Partir la vieja" Publicado: 27/03/2017: 9789 El domingo IV de Cuaresma, domingo laetare, es tradicionalmente una fecha en la que se suaviza la sobriedad cuaresmal y predomina un carácter alegre, puesto que la Pascua ya se acerca. Rafael Caro, párroco de Arriate, explica la tradicional fiesta que se celebra en esta localidad vecina de Ronda y que se conoce como “partir la vieja”. Nos tenemos que remontar a la Málaga del siglo XVI en el municipio de Arriate cuando el pueblo, no contento con un régimen cuaresmal tan duro, luchó por establecer un día de descanso de la penitencia, un día que partiría la Cuaresma en dos mitades, de ahí el termino popular de “Partir la Vieja”: partir la vieja cuaresma con un día libre de “prohibiciones”, en el cual las familias y los amigos salen al campo a compartir un gran banquete. «Lo curioso de esta fiesta –afirma el párroco– es que su origen era pagano. La Iglesia tuvo que aceptar las peticiones del pueblo y permitir la celebración de este día que está representado por la sencilla figura de “La Vieja”». La figura consiste en una muñeca en forma de anciana vestida de negro y paseada por la gente en el campo para risas de pequeños y mayores, que acababa siendo quemada en una hoguera. La zona de influencia de esta celebración es el municipio de Arriate y sus aledaños (las Huertas, la Cimada y los Prados), Serrato y Cuevas del Becerro. Para este día, los arriateños eligen lugares extensos para poder desplegar todos los bártulos y que quepan los allegados del pueblo. La zona conocida como Parchite era el lugar perfecto, cuenta el párroco. Rafael conoce perfectamente los platos que predominan en esta fiesta: «sobre todo los platos típicos como las chacinas del pueblo, el salmorejo, el huevo duro, carnes cocidas y a la brasa y el famoso limón dulce». Aprovechando que este día es para compartirlo, las personas con menos recursos del pueblo son convidadas con gran generosidad. Jaime Puig Díaz-Maroto