NoticiaParroquias Arriateños ayudan a embarazadas y recién nacidos en República Democrática del Congo Publicado: 30/08/2022: 12333 Solidaridad Desde el 23 de agosto, un grupo de arriateños acompañados de su párroco, Rafael Caro, están en El Congo inmersos en un proyecto sanitario y educativo que vienen desarrollando desde 2018 bajo el nombre de “Contagia Solidaridad”, en el que implican a toda la comunidad parroquial. Esta aventura arranca en 2018, cuando varias personas de la parroquia de San Juan de Letrán, en Arriate, siguiendo la estela de su párroco, Rafael Caro, se interesan por tener una experiencia misionera. La parroquia entra en contacto con un grupo de la diócesis de Almería que está formado mayoritariamente por sanitarios y que, a través de una religiosa que está en Boma (Congo) desde hace 25 años, colabora para atender la maternidad. El riesgo de muerte en el parto de las mujeres en esa zona de África es muy elevado. El compromiso de la comunidad de Arriate es el de colaborar económicamente para la construcción de una sala de maternidad. «Ha sido una experiencia muy bonita porque se ha implicado toda la parroquia y a gran parte del pueblo vendiendo buñuelos, organizando verbenas, conciertos, etc. —cuenta Caro—. Así todos en la parroquia sentimos como propio este proyecto. Se ha hecho en colaboración con Cáritas parroquial de Arriate y de Boma y Mons. Cyprien, el obispo, que ha facilitado todo. En 2019 se hizo la primera expedición acompañando a los sanitarios, médicos y enfermeras, y se inició la construcción de la sala. En 2020 ya empezó a funcionar con un quirófano completo, sala incubadora para niños prematuros, salas de recuperación… algo impensable. Por la pandemia, el proyecto tuvo que pararse y ahora se ha reiniciado con la ampliación de una sala de pediatría sobre la de maternidad. En la actualidad es en lo que estamos implicados». Entre quienes les acompañan, hay dos traumatólogos, José Luis y Tamara, que están trabajando sin descanso en estos días operando y pasando consulta; cuatro enfermeras, Ana, Rocío, Purificación y Rocío, para atender a los pacientes y formar personal; una óptica, Concha, que gradúa la vista a quienes lo necesitan; una psicóloga y una maestra, María del Mar y Amanda, que trabajan en el desarrollo educativo con los niños de un orfanato y dos personas que se dedican a la construcción, Antonio y Vicente, y que continúan las labores de la infraestructura. «Y luego estoy yo, el cura, que está un poco para todo, atendiendo aquí y allí. Nos da mucha alegría ver cómo está funcionando la maternidad y cómo se está ultimando la parte pediátrica, resultado de este esfuerzo compartido». Durante su estancia, el grupo de Arriate ha podido estar participando de la celebración de los 50 años de sacerdocio y 25 de obispo de Mons. Cyprien Mbuka, que les ha agradecido públicamente el trabajo que se viene realizando durante estos años. Para el grupo que se ha podido trasladar hasta Boma, está siendo también un viaje muy espiritual. «Rezamos los laudes nada más levantarnos, antes del trabajo, y al terminar el día, celebramos la Eucaristía que, en ocasiones, podemos vivir en la capilla del obispo Cyprien y en su compañía», cuenta Rafael.