Los miembros de la nueva junta de gobierno de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa, presidida por Eduardo Pastor, tomaron ayer posesión de sus cargos en el transcurso de una función religiosa presidida por el obispo, Jesús Catalá, en la iglesia de San Julián, y en la que actuaron como concelebrantes el delegado episcopal de hermandades, Francisco Aranda, y el párroco de los Mártires, Federico Cortés.

En su homilía, el prelado malacitano les invito a gozar del amor de Dios, «que nos ama con amor de Padre» y añadió: «debemos sentirnos amados por Dios con un infinito amor de padre, que cuida providencialmente de nosotros. Dejemos que nos abrace, que nos eleve hacia sí, que nos acaricie y nos llene de besos. ¡Gocemos de la ternura de Dios para con nosotros! Queridos cofrades, vivid esa experiencia y transmitidla a los demás».

El obispo de Málaga también abordó el tema de la falsa modernidad. «Ciertas modas, que se presentan como progresistas, son en realidad un paso atrás. En nuestra sociedad se ha regresado hacia modas antiguas, que la mentalidad cristiana había superado y transformado; lo que algunos defienden como progresista es realmente retrógrado; lo que se presenta a veces como un derecho logrado es, en verdad, un paso atrás».

Don Jesús animó a los cofrades a no perder de vista la luz de la fe, que debe impregnar todo lo humano. «Los no-creyentes desean que la religión quede relegada al ámbito de lo privado y que no tenga influencia en la vida social; pero eso es imposible, porque la luz del Evangelio debe iluminar todos los aspectos y dimensiones de la existencia humana: la vida, la familia, el trabajo, al cultura, la economía, la política…».

A partir de ahora, comienza la nueva andadura de tres años (según los estautos vigentes) que tiene como retos principales abrir un debate profundo y consensuado sobre horarios e itinerarios, incentivar las visitas al Museo de la Semana Santa, aprobar nuevos reglamentos de Horarios e Itinerarios, Sillas y Tribunas y Protocolo o hacer un nuevo trono para el Resucitado.