La tragedia del vertedero de Zaldivar ha unido en el dolor a los pueblos de El Burgo, Zalla y Markina. En estos días en los que la espera por el hallazgo de los cuerpos de Joaquín Beltrán, natural de El Burgo de 53 años, y Alberto Soloiza se hace dura, interminable y desesperanzadora  para familiares, amigos y conocidos, la comunidad parroquial de Santa María de la Encarnación, en El Burgo, quiere transmitirles su fuerza, fe y esperanza en el Señor. Para ello, han convocado una vigilia de oración el próximo domingo, 16 de febrero, a las 19.00 horas, en la iglesia de San Agustín de El Burgo para "que unidos todos en una misma plegaria, oremos por el final de este duro momento", expresan desde la parroquia.

Como recogen los medios de comunicación, más de medio millón de metros cúbicos de residuos industriales, entre ellos residuos de amianto, se precipitaron sobre las 16.00 horas del pasado jueves ladera abajo y sepultaron a los dos trabajadores del vertedero, además de cortar la autopista AP-8 (Bilbao-San Sebastián) en ambos sentidos y la carretera N-634 a la altura de Zaldibar.

En unos primeros instantes se echó en falta a siete trabajadores del vertedero, propiedad de la empresa Verter Recicling 2002, pero pronto se averiguó que los desaparecidos eran dos hombres, uno de 62 años y natural de Eibar (Gipuzkoa) aunque reside en la localidad vizcaína de Markina y otro de 53 años, de residente en Vizcaya desde hace años, pero natural de Málaga. Desde entonces, no se han detenido las labores de búsqueda.

Joaquín tiene familia y casa en la localidad malagueña, y suele pasar en ella sus vacaciones de verano. Es muy conocido en el pueblo, especialmente por su solidaridad, y algunos vecinos cuentan que, al parecer, fue sepultado por el desprendimiento cuando trataba de advertir a los demás. De forma espontánea, los burgueños han hecho circular por redes sociales una imagen de una vela con los nombres de los dos desaparecidos, animando a la oración para que pronto sea posible encontrarlos.