Fue la fiesta de la fe. Ilusión, júbilo y la creencia unió ayer a más de 5.000 jóvenes peregrinos procedentes de todos los rincones del mundo, incluidos los de la diócesis de Málaga en el auditorio municipal. El encuentro, celebrado en el primer día de Feria, fue la antesala de la Jornada Mundial de Juventud (JMJ) que se celebra en Madrid del 16 al 21 de agosto con la asistencia del Papa. "Es un momento muy importante para todos nosotros. No importa el idioma. Nuestra fe nos une a todos. Además muchos de nosotros vamos a cumplir nuestro sueño de ver al Papa", señaló Mikel Penn, un peregrino australiano de 20 años.

Pero antes de acudir al acto religioso, muchos de estos jóvenes tuvieron tiempo para pasearse por la Feria. "Esta mañana [por ayer] hemos estado en el centro de la ciudad. Me ha impresionado mucho ver a tanta gente, muchas de ellas vestidas con traje de flamenca. Me ha gustado mucho", señala Helga Boss, una joven venezolana.
También se organizaron diversas excursiones por la ciudad. "Hemos visto la Catedral, también hemos conocido el centro de la ciudad y hemos estado frente a la casa en la que nació Picasso. Siempre me habían hablado del pescaíto frito. Hoy [por ayer] lo he probado y está buenísimo", explicaba una joven peruana a la espera de que abriesen las puertas del auditorio.

Desde las 17:30 empezaron a llegar peregrinos a las puertas del auditorio. Diferentes corros entonaban cánticos religiosos que, junto la sombra de algún que otro árbol, hacía más amena la espera bajo un sol que hizo justicia. Timbales, guitarras, silbatos y palmas sonaban incesantemente. "Somos un ejemplo de la juventud europea. Estamos todos unidos celebrando nuestra fe", explicó Jean Paul Renné en un español bastante logrado.

El encuentro comenzó con una oración internacional presidida por el obispo de Málaga, Jesús Catalá. Asimismo participaron diversos obispos extranjeros que se desplazaron ala ciudad con motivo de la JMJ. Tras la oración, diversos grupos católicos como Desde el silencio, Unai Kyros, Jerusalén, Ixcís y Shalahim ofrecieron un recital de música religiosa. A ello le siguió una muestra de folclore malagueño, en la que destacó la actuación de un cuadro flamenco de baile.

Tras el acto religioso muchos de estos visitantes disfrutaron del primer día de Feria en el Real Cortijo de Torres. "Vamos a aprovechar la noche para conocer cómo es la Feria. Tengo pensado comprarme una flor para el pelo para lucirla", señaló Mariela, una joven peruana de 18 años.

El objetivo de la jornada de ayer, programada por la diócesis de Málaga, era "compartir la fe de una manera cercana, dar a conocer la rica historia y la vida de la iglesia malacitana, enseñando la tierra y las costumbres de la capital de la Costa del Sol".

La llegada del contingente de peregrinos procedentes de todo el mundo se ha producido durante todo el mes de agosto, aunque fue el pasado jueves por la tarde cuando se dio por finalizada la peregrinación hasta Málaga de unos 3.000 jóvenes que fueron acogidos en parroquias, polideportivos, casas religiosas y otros lugares.
Durante el día de hoy, algunos jóvenes disfrutarán de la Feria, otros descansarán para continuar su viaje mañana hasta Madrid y participar en el JMJ hasta que el próximo sábado puedan ver al Papa.