NoticiaEntrevistas P. Cristiano Pinheiro: «Tras los tatuajes juveniles hay un deseo de eternidad» Cristiano Pinheiro, responsable de la Comunidad Shalom // E. LLAMAS Publicado: 18/04/2018: 19892 Conciertos pop-rock-alabanza Hallelujah y encuentros en cafeterías son algunas de las muchas experiencias que la Comunidad Shalom organiza para llevar el Evangelio a los jóvenes. El sacerdote Cristiano Pinheiro C. Bede, responsable de la Oficina Internacional de esta comunidad, los explicó recientemente, en Málaga, en las jornadas para vicarios, arciprestes y obispos de Andalucía. «Muchos jóvenes no aceptan una invitación para ir a Misa o a un retiro espiritual, pero si les propones tomar un café, con mucho gusto vienen» Experiencias en cafeterías, ¿cómo se hace esto? Muchos jóvenes no aceptan una invitación para ir a Misa o a un retiro espiritual, pero si les propones tomar un café, con mucho gusto vienen. Se trata de organizar puntos de encuentro para favorecer el acercamiento de los jóvenes, es una verdadera puerta de entrada. Allí los jóvenes misioneros, los que han vivido una experiencia de encuentro con el Señor, comparten con ellos las cosas bonitas y profundas que han experimentado en la fe. Tenemos que tener el coraje de crear esos ambientes neutros y atrayentes, dando lo mejor de nosotros mismos. El mundo del pecado trabaja muy bien, hace cosas estupendas y atractivas. Tenemos que tener la audacia de la fe para hacer cosas muy buenas, bonitas y profesionales que favorezcan el encuentro con Jesús. Se trata de anunciar a través de la amistad, encontrando la vía del corazón de cada persona. Es una manera muy eficaz de transmitir el Evangelio. ¿Es esa la clave del éxito de los conciertos que se celebran con el nombre Hallelujah y que reúnen a un millón de jóvenes? Se trata de cinco noches de conciertos pop-rock para los que hacemos una buena campaña publicitaria en redes sociales, televisiones, radios… pero cuando preguntamos a los jóvenes cómo conocieron el Hallelujah, la gran mayoría dice que fue un amigo quien le invitó. Es decir, el contacto personal es lo más importante. Son muchos los que vienen una noche, por acompañar a un amigo y se quedan las cinco. El contacto personal es insustituible. El acompañamiento es fundamental. Nadie puede vivir el Evangelio solo, sin una comunidad, en la que compartamos y crezcamos, para adherirnos al Evangelio. Están presentes en muchos países, ¿son muy distintos los jóvenes de unos y otros países? Ciertamente, la cultura nos hace personas muy diferentes, pero también es cierto que el corazón de los jóvenes es el mismo. La sed y los deseos que tienen son los mismos, entre ellos, la búsqueda de algo estable en su vida. Llevo diez años viviendo en Italia y voy conociendo la mentalidad de los jóvenes europeos. Muchos se hacen tatuajes para que, por lo menos en su carne haya algo que no pase, que permanezca, es el deseo de eternidad lo que los empuja. Por eso es importante que descubran que hay algo mucho más grande que un tatuaje y no pasa nunca; y es el encuentro con el Señor.