Diecinueve sacerdotes concelebraron la Misa Corpore Insepulto de D. Manuel, que fue despedido con recuerdos constantes a su buen humor y a su trabajo dedicado y constante. D. Ramón ha destacado de él "ser servidor fiel a la Iglesia y a los cinco obispos con quienes ha trabajado".

D. Manuel Paz Florido fue responsable de obras del Obispado de Málaga y de las Escuelas Rurales hasta su jubilación, hace más de veinte años.

Desempeñó esta tarea con total diligencia y dedicación, simultaneándola con la de chófer del Sr. Obispo.

Trabajador incansable estuvo siempre pendiente del mantenimiento de las Escuelas-Capillas desde sus orígenes, razón por la que era muy querido por todo el Magisterio Rural.

La Diócesis de Málaga ruega una oración por su alma.