NoticiaHermandades y Cofradías Alcalde Francisco de la Torre, un «cristiano comprometido» Medalla de oro de la Agrupación a Francisco de la Torre. FOTO: LA OPINIÓN DE MÁLAGA Publicado: 22/01/2017: 9242 El Obispo de Málaga presidió este sábado 21 de enero el acto de Concesión de la Medalla de Oro de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa de Málaga al alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre. En su homilía, Mons. Catalá se unió a este gesto de gratitud «hacia quien ha sabido dar testimonio de manera coherente como cristiano comprometido en la transformación de las estructuras sociales y políticas, tal como pide el Concilio Vaticano II a los fieles cristianos laicos». «Os animo a superar las divisiones entre vosotros y a ser promotores de paz y de comunión sobre todo en vuestras cofradías» «¡Querido D. Francisco –continuó el prelado–, muchas gracias por su tesón, valentía, dedicación y generosidad en la no fácil tarea de gobernar esta amada Ciudad! ¡Cuántas veces le he comentado que Vd. se ha multiplicado por estar presente en más actos cofrades que el propio Obispo! Si el Señor le hubiera concedido el don de la bilocación, su presencia hubiera sido incontable. ¡Muchas gracias por todo el apoyo y la colaboración que ha dado al mundo cofrade desde las instancias de gobierno!». En la homilía, Catalá se ha dirigido también a los cofrades a quienes ha conminado a «ser antorchas que arden de amor y buscan la fraternidad; (los hermanos) deben ser luminarias que propagan la luz de Cristo; deben ser presencia sanante en el dolor; deben dar esperanza ante cualquier situación humanamente difícil, incluida la muerte. Las cofradías nacieron, como bien sabéis, para ayudar a los hermanos enfermos, moribundos y difuntos que no tenían recursos. Deseo felicitaros porque hoy en día seguís manteniendo la dimensión de ayuda social a los más necesitados. Gracias a Dios eso no lo habéis perdido y espero que no lo perdáis». «Algunos cofrades, continuó el Obispo, pueden vivir en tiniebla y necesitar la luz que los saque de esa oscuridad u ofuscación; pueden vivir ofuscados por problemas, por temas concretos, por cuestiones, por derechos pisoteados. Y pueden también ponerse a veces “enfermos espiritualmente” y necesitar los cuidados de los otros hermanos, para que no se pierdan, para sanar, para salir de su ofuscación o de falta de luz. Hago una llamada, queridos cofrades, a vuestra misión de ser luz en la tiniebla y apoyo en la flaqueza del otro hermano». Finalmente, D. Jesús ha realizado una invitación a los cofrades a no andar divididos: «No se trata de tener todos la misma opinión o decir todos lo mismo, porque se perdería la riqueza de los diversos miembros de la comunidad o de la hermandad. Se trata, más bien de estar unidos a Cristo, asimilando sus actitudes, sentimientos, estilo, y obediencia a la voluntad del Padre. (...) Os animo a superar las divisiones entre vosotros y a ser promotores de paz y de comunión sobre todo en vuestras cofradías». Aquí puedes leer la homilía íntegra