DiócesisLectio Divina Lectio Divina con el Evangelio del domingo de la Octava de Navidad Vivamos un tiempo nuevo con Jesús. Tengamos en nuestra vida un antes y un después de Cristo · Autor: Pachi Publicado: 24/12/2014: 3064 Antonio Collado, vicario de la Promoción de la Fe y párroco de San Juan Bautista de Málaga, nos ofrece la Lectio Divina con el Evangelio del domingo de la Octava de Navidad Lectura (Lectio) La promesa hecha a Abrahán encuentra su pleno cumplimiento en Jesús y ante él los ancianos Simeón y Ana confiesan su fe. María y José son ejemplo de la confianza que se hace admiración y escucha de la voluntad de Dios. Leo con atención, dejándome interpelar por el texto. Meditación (Meditatio) El pasaje que me ofrece hoy la liturgia pertenece a los dos primeros capítulos del “evangelio de la infancia” de Lucas. En él se recogen los grandes temas que atraviesan la obra del evangelio; me detengo en tres: la presencia de la ley y el Espíritu, la salvación universal y el testimonio-rechazo. La ley aparece relacionada con la Sagrada Familia que se somete a las prescripciones sobre la purificación de la mujer después de dar a luz (Lv 12,28) y la presentación del primogénito (éx 13,2.12-13). Por su parte, Simeón es un hombre movido por el Espíritu Santo. Lucas está expresando de esta manera que lo viejo y lo nuevo se entrelazan, que existe una continuidad en la promesa de Dios. María, José y el niño son acogidos en el templo, el centro de la vida religiosa judía, por el anciano Simeón. Junto a la profetisa Ana, representan la antigua alianza, personifican a los judíos fieles que esperaban la salvación de Israel y la encuentran en Jesús. Lucas está diciendo que así es como se debe recibir el mensaje cristiano. Se apuntan también el tema de la universalidad del mensaje de Jesús; enviado no solo a Israel sino a todos los pueblos, “como luz para iluminar a las naciones”. Por último Simeón dirige a María unas palabras enigmáticas. Hablan de acogida y de rechazo (Lc 2,34-35). Es la historia de la vida de Jesús contada en pocas palabras, una vida llena de gloria y humillaciones. Es también la historia de Israel, dividido ante la venida del Señor. Sobre María recae esta división y desgarro, porque es madre de Jesús y parte del pueblo elegido. Esta ruptura madurada desde la fe y la cruz, provocará un nuevo alumbramiento: ella es la madre del nuevo Israel, la madre de los creyentes. Oración (oratio) ¿Acojo a Jesús con los brazos abiertos como estos dos personajes que se movían en torno al templo? ¿Dónde veo hoy al Salvador? En la oración pausada y tranquila descubro la acogida que le doy a Jesús en mi vida. Contemplación (contemplatio) Sólo una mirada contemplativa, como la de estos ancianos que reconocen al Mesías en un niño, puede descubrir a Dios en los acontecimientos más simples. Pido al Señor este don desde el silencio. Compromiso (actio) La familia de Nazaret, ¿me invita a implicarme con ahínco en la construcción y revalorización de la familia cristiana? Antonio Collado Sacerdote diocesano Más artículos de: Lectio Divina Lectio Divina con el evangelio del domingo II de NavidadLectio Divina con el Evangelio del domingo IV de Adviento (Ciclo A) Compartir artículo Twitter Facebook Whatsapp Enviar Imprimir