NoticiaCatequesis Encuentro de delegados de catecumenado de toda España, en Málaga Publicado: 29/03/2022: 4974 Iniciación Cristiana Del 29 al 31 de marzo, los delegados y responsables diocesanos para el catecumenado han celebrado su encuentro anual en Casa Diocesana Málaga, donde han tratado el tema del precatecumenado en el proceso de Iniciación Cristiana de niños, adolescentes y adultos. La Comisión Episcopal para la Evangelización, Catequesis y Catecumenado es la organizadora de este encuentro, inaugurado por Mons. José Rico Pavés, obispo presidente del área del Catecumenado, el martes 29. El prelado afirmó que «estas jornadas responden a la situación de nueva evangelización en la que nos encontramos. El contexto actual es de nuevo paganismo, y tiene más paralelos con el periodo de la Iglesia naciente que con el de hace cien años. Pero aún tenemos en la mente una configuración de la acción catequética de la infancia, y desde ahí configuramos la catequesis de los mayores. Cuando los párrocos o sacerdotes se encuentran con adultos, no saben cómo proceder y adaptan el ritual del bautismo de niños a situaciones que no quedan bien resueltas. Pero ya desde el Directorio de Catequesis del año 97, se nos dice: “el catecumenado de adultos es la forma típica de todo catecumenado en la Iglesia”. Estas jornadas por primera vez plantean el catecumenado uniendo infancia y adultos, destacando la unidad del itinerario. En ese nuevo paso que queremos dar, comenzamos por el precatecumenado». A él siguió la intervención del responsable del área, Felip-Juli Rodríguez Piñel, para situar la actualidad del catecumenado en las diócesis españolas, una actualidad marcada por el aumento de adultos que solicitan preparación para recibir los sacramentos. Actualmente unos 1.000 adultos están en este proceso. «En muchas diócesis ya está instaurado el catecumenado, pero aún hay unas 20 que no han dado este paso», ha afirmado. «Esto indica la necesidad del mismo, tanto en adultos como en niños en edad catequética. Urge mantener la sensibilización y la nitidez del itinerario catecumenal, tanto por parte de los obispos como por parte de los párrocos, para asegurar la experiencia de los catecúmenos con Cristo en el interior de la comunidad eclesial». En este camino, Rodríguez Piñel constata la importancia de la acogida y la necesidad de un discernimiento de la situación de cada aspirante así como la necesidad de un equipo catecumenal o un secretariado diocesano del catecumenado. «Los mejores acompañantes de catecúmenos son los laicos, es algo comprobado. Se establece una relación especial de acompañamiento». El ponente ha remarcado también la importancia de la Mistagogía, de la formación de acompañantes y catequistas y «la necesaria presencia del Obispo, no solo ritual-litúrgica, sino catequética con los catecúmenos». El miércoles, la jornada incluyó la ponencia del vicario episcopal y delegado del Catecumenado de Girona, Joan Amich i Raurich, que habló sobre la importancia de la etapa del precatecumenado en el proceso catecumenal, y el trabajo en grupos sobre las necesidades, dificultades y posibilidades del proceso catecumenal en las diócesis. La tarde, los asistentes la dedican a una visita cultural al centro de la ciudad: el canónigo Miguel Ángel Gamero guió la visita a la Catedral de Málaga. A continuación, Felipe Reina, párroco de San Juan, les llevó a conocer la parroquia de San Juan y se acercaron a la Casa Hermandad de Fusionadas, en la que tanto el hermano mayor como algunos miembros de la Junta de Gobierno les mostraron su rico patrimonio religioso y les acompañaron en la visita a su Casa Hermandad y a las catacumbas con restos de la muralla árabe. La tarde terminó con un paseo distendido por el centro. En palabras del sacerdote Jesús Hurtado, delegado de catequesis de la Diócesis de Málaga, que acoge esta cita, este encuentro tiene tres valores fundamentales: «el primero, la comunión de todas las diócesis españolas, a través de sus delegados, en torno al catecumenado y la catequesis; el segundo, de profundización en un tema, en este caso el precatecumenado en el proceso de Iniciación Cristiana de niños, adolescentes y adultos; y el tercero, el conocer otras realidades de las diócesis españolas. En el anterior encuentro de delegados de catequesis de toda España en el mes de febrero, en el que pude participar, me resultó de gran utilidad conocer distintas iniciativas que se estaban desarrollando en otras diócesis españolas, primero para ver que es un tema en continua renovación y, segundo, para ver cuáles son las realidades propias que se pueden implementar. Al fin y al cabo, esta reflexión sobre el catecumenado nos ayuda y enriquece a todos, desde las distintas perspectivas y las iniciativas que surgen en cada diócesis». El jueves comenzó con el tema “La reiniciación cristiana de adultos” impartido por Francisco Romero Galván, secretario técnico de la Comisión Episcopal para la Evangelización, Catequesis y Catecumenado. Este subrayó la idea de que el mandato misionero que Jesús da a sus apóstoles para que otros puedan conocer a Cristo y vivir el Evangelio, se hace en la situación actual un «reto ilusionante y esperanzador para la Iglesia de nuestro tiempo, sabiendo que Cristo “estará todos los días hasta el final de los tiempos”. La realidad que vivimos no es motivo para el desencanto misionero -afirmó-. Pero por ello mismo, hemos de renovar el ardor evangelizador y misionero y contagiar a nuestras comunidades cristianas». Romero incidió en la experiencia de adultos que tienen que reiniciarse en su fe, «porque ya han recibido el bautismo pero han olvidado lo que recibieron, cristianos sacramentados pero no partícipes en la fe». También se centró en despertar en los participantes las respuestas a varios interrogantes: cómo anunciar el Evangelio, dónde, en qué ámbitos de la vida, y quiénes son los agentes principales de esta misión. El secretario técnico de esta comisión concluyó con la invitación a que «desde las comunidades cristianas se sigan buscando modos y maneras de ayudar y suscitar esa pregunta religiosa a aquellos que recibieron los sacramentos de Iniciación Cristiana, pero viven una fe incipiente aún, no madura; a preguntarse por la catequesis de adultos, y «si estamos respondiendo a esta necesidad en la Iglesia». Además, el diácono permanente de la diócesis de Cádiz, Manuel López López, ha ofrecido su testimonio sobre cómo acompañar a los adultos en la etapa del precatecumenado. La última ponencia de estas jornadas ha corrido a cargo del vicario episcopal para la Evangelización y la Transmisión de la fe de Getafe, Jesús Úbeda, quien ha abordado la cuestión de cómo acompañar en esta etapa a niños y adolescentes. En su reflexión, Úbeda ha destacado el necesario trabajo con la familia, incluidos los abuelos, porque su papel es sustancial en el precatecumenado para propiciar en los pequeños el encuentro con Cristo. También el de los profesores, sacerdotes, catequistas e incluso el resto de niños de la comunidad parroquial. Para el niño, afirma Úbeda, la presencia de Cristo es fácilmente identificable en dos presencias muy concretas: los otros niños y los pobres. Respecto a los adolescentes, entre 13 y 17 años, los jóvenes necesitan ver la relación entre la fe y la vida, para entrar en el verdadero proceso del precatecumenado. En ese camino pueden resultar útiles recursos como los audiovisuales, por ejemplo, series de ficción o música que enganchen con sus intereses y sirvan de medio para ayudar al joven a ver concretada la acción de Dios en la vida de las personas. En el encuentro ha participado Mons. Javier Salinas, presidente de la Comisión de Evangelización, Catequesis y Catecumenado, y ha destacado la presencia de seglares, entre ellos de la Diócesis de Málaga: María Fernanda Torres (secretaria de la Delegación Diocesana de Catequesis) y Angelines Morales (responsable del sector de adultos de la comisión permanente de la Acción Católica General).