NoticiaSeglares Mons. Catalá pide que el Vaticano II llegue a la práctica Publicado: 21/02/2015: 14229 Este sábado se ha celebrado en el colegio de Gamarra el Encuentro de Apostolado Seglar con el lema "La misión de los cristianos laicos". Tras la oración comunitaria, D. Jesús Catalá ha expuesto su ponencia sobre la Exhortación Apostólica Post-Sinodal "Christifideles Laici" El vicario episcopal para el Laicado Asociado, Antonio Coronado, fue el encargado de presentar la ponencia del Sr. Obispo sobre la “Christifideles Laici”, recordando su excepcional perspectiva, pues Mons. Catalá trabajaba en la Secretaría General del Sínodo de los Obispos precisamente durante la celebración de la VII Asamblea Ordinaria del Sínodo de los Obispos (octubre 1987), que dio como fruto dicha Exhortación Apostólica. Mons, Catalá inició su ponencia explicando qué dice el derecho danónico sobre el asociacionismo en la Iglesia, el derecho de los fieles a asociarse y la diferencia entre movimientos y asociaciones. «Los movimientos no proceden de la voluntad de un grupo de asociarse –señaló–. Provienen en primer lugar de un don del Espíritu Santo que llamamos carisma y que concede a alguien. Ese carisma tiene que ser discernido por el obispo». Posteriormente, desgranó los criterios de eclesialidad para las asociaciones laicales entre las que se encuentran: el primado a la vocación del cristiano a la santidad, la responsabilidad de confesar la fe católica, el testimonio de la comunión, la participación en la evangelización y el compromiso en una presencia en la sociedad. «Aquella asociación que no busque esto, está fuera de la Iglesia», añadió. D. Jesús pasó luego a presentar la estructura de la Exhortación Apostólica “Christifideles Laici” cuyo objetivo, afirmó, es: «lograr que la espléndida teoría que dio el Vaticano II llegue a ser realmente una praxis eclesial. Es decir, poner en práctica lo que ya había dicho el Concilio. Tomar conciencia del don y la responsabilidad que todos los fieles laicos tienen en la comunión y en la misión de la Iglesia». Como testigo de excepción de la elaboración y traducción de este documento, el Sr Obispo explicó algunos entresijos del texto eclesial como el proceso de elección del título o el porqué de la imagen de la viña que sirve de hilo conductor de todo el documento. Finalmente, el obispo malacitano respondió a varias preguntas de los asistentes y animó a los fieles laicos a formarse para cumplir con la tarea que les encomienda la Iglesia. Tras la ponencia, hubo un espacio para el diálogo y la convivencia. Posteriormente, se trabajó por grupos el cuestionario propuesto para la reflexión y se pusieron en común las conclusiones.