NoticiaColaboración «Ser lo que somos» por Francisco Castro, sacerdote diocesano Publicado: 28/11/2012: 1481 En este tiempo nuestro, dominado por la imagen y el marketing, ocurre a menudo que cada cual intenta camuflar sus intereses para lograr que otros compren su producto o voten a su partido. La vida entera se convierte entonces en un gran mercado, donde nadie puede fiarse de nadie, donde todos intentan engañar a los demás. En este contexto, los creyentes podemos realizar un servicio muy necesario: intentar ser, simplemente, lo que somos. Ser creyente, en verdad, no cuenta hoy con una buena posición de partida en el zoco social donde todo se puede comprar y vender, si se le da la forma adecuada. Además, la forma del anuncio cristiano es siempre la misma: “nosotros predicamos a Cristo crucificado: escándalo para los judíos, necedad para los gentiles” (1Co 1,23). Sin embargo, el anuncio del Evangelio tiene más futuro que los reclamos comerciales, pues ofrece la salvación para toda persona. El marketing aliena, el Evangelio dignifica. Lo uno es solo espejismo, lo otro es realidad y sentido para la existencia. En este Año de la fe, ¿estamos dispuestos a ser o solo a vender? Autor: Francisco Castro, sacerdote diocesano