Isabel Naranjo es coordinadora de contenidos de Onda Cero Málaga, donde conduce Más de Uno Málaga, programa local de actualidad que esta radio emite cada día. Es corresponsal en Málaga del diario La Razón. Licenciada en Periodismo por San Pablo CEU, ha estudiado también Ciencias Políticas y ahora, Derecho por la UNED.

¿Cómo ha recibido la concesión de este premio?
Ha sido toda una sorpresa que me ha provocado una enorme alegría, a la vez que responsabilidad al sentirme reconocida por una institución a la que tanto respeto y admiración profeso.

¿Qué significa para usted la figura de D. Ángel Herrera Oria?
Es una figura clave en la historia del siglo XX que contribuyó como nadie a divulgar y proclamar la doctrina de la Iglesia Católica; un auténtico líder espiritual que desarrolló una vasta labor evangelizadora amén de una ingente labor social. Y Málaga tuvo el honor de tenerlo como obispo entre los años 1947 y 1966.

¿Es una persona creyente? ¿Le ayuda serlo en el desarrollo de su profesión?
Sí, lo soy. Es algo que me inculcaron mis abuelos desde que nací y me hace además tenerlos presente cada día. No sólo me ayuda en el desarrollo de mi profesión, sino en todos los ámbitos de la vida, por supuesto. Siempre tengo mi fe presente.

¿Cuándo fue su encuentro con Jesús, si es que se ha producido así, de forma patente?
En un retiro Emaús al que asistí el pasado mes de noviembre en la Casa Diocesana de Málaga. Fue un fin de semana maravilloso, que repetiría una y mil veces.

En sus redes sociales has sentido la muerte de Benedicto XVI. ¿Con qué titular lo definiría?
Muere un gran teólogo, Benedicto XVI, primer Papa Emérito.

Empezó en Onda Cero como becaria y, desde el 98, es periodista de plantilla, primero en Marbella, después en Málaga, donde a día de hoy le escuchan miles de oyentes cada día. ¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo? 
Me siento una privilegiada por llevar 25 años trabajando en un medio que me apasiona y me permite conocer a gente muy interesante y poder contárselo a mucha gente.

El Evangelio es buena noticia. ¿Cuál es la mejor noticia que ha dado?
Por desgracia, las malas noticias prevalecen o hacen “más ruido” que las buenas. Pero siempre hay cosas positivas que contar. Y en este caso, poder divulgar la importante labor de la Iglesia católica es, además de un privilegio, una gran satisfacción a nivel personal.