La Legión de María es un movimiento internacional de seglares católicos, que tiene como finalidad dar gloria a Dios.

Y lo hace mediante la santificación de sus miembros, a través de la oración y el trabajo activo de colaboración en la obra evangelizadora de la Iglesia, sustentados y alentados por una intensa devoción a la Santísima Virgen.

“Es un movimiento de seglares que se proponen hacer de la fe la aspiración de la propia vida”, así lo definía san Juan Pablo II. Se fundó en Irlanda en 1921 y está extendida por todo el mundo. Su fundador fue Frank Duff, con la colaboración de Edel Mary Quinn y Alfonso Lambe, que se hallan en proceso de beatificación.

El primer grupo en Málaga se creó en 1960 y en la actualidad cuenta con seis grupos en diversas parroquias de la diócesis: San Felipe Neri, Santa María de la Victoria, Purísima Concepción, Cristo Rey y Santa María Goretti, en Málaga y Cristo Resucitado, en Torremolinos. El director espiritual del movimiento es el sacerdote José Diéguez. Celebran reuniones semanales de grupo, en las que comparten oración, revisión de la actividad apostólica y estudio de temas formativos para hacer más eficaz el apostolado.

El campo de acción de la Legión de María es ilimitado. Esencialmente, «se dedica a la evangelización por medio del trato humano y cordial de persona a persona. Los más frecuentes en nuestra diócesis son: acompañamiento y atención a enfermos y ancianos en domicilios, hospitales y residencias; catequesis; visitas a hogares de la parroquia; contactos callejeros; reparto de evangelios, rosarios, prensa católica; y colaboración constante en las actividades de nuestras parroquias», explican desde el movimiento.

Para más información, legiondemariamalaga@gmail.com y la web oficial www.legiondemaria.es

TESTIMONIO. Cecilia Paz

Aquí puedes escuchar el testimonio emitido en Cope Málaga

Es una alegría poder compartir con vosotros la experiencia de pertenecer a la Legión de María. Mi nombre es Cecilia Paz. Formo parte de la Legión de María desde hace 14 años. En ella aprendí el servicio apostólico de llevar el mensaje de Jesús, dando consuelo y esperanza a tantos hermanos que lo necesitan.

Siempre se experimenta ese sentimiento de haber recibido de ellos mucho más de lo que nosotros podemos darle porque es verdad que no es obra nuestra, sino que somos instrumentos del amor y la misericordia de Dios. Él actúa en todos los corazones que se dejan amar.

Nuestras vidas, en mi caso como madre de familia, continúan su curso con problemas y sin ellos, pero sintiendo una fuerza y una luz nuevas antes desconocida. Pertenezco a un grupo llamado "Dulce Nombre de María", de la parroquia de la Purísima, en Málaga. Estamos al servicio del párroco.

Fui invitada a ser ministro de la comunión, apostolado que se une íntimamente con el de legionaria de María. Además, nos lleva a vivir con intensidad el sentido de pertenecer a nuestra Iglesia Católica.

Gracias por permitirnos hacer presente la Legión de María en los medios diocesanos.