NoticiaSocial Seglares y sacerdotes se unen para acompañar a las personas sin hogar Publicado: 07/05/2024: 4132 El Palo En el barrio malagueño de El Palo, seglares y sacerdotes de las distintas parroquias se han constituido como asociación para dar respuesta a una realidad que les interpela: la de las personas en situación de calle. La Casa de Acogida La Esperanza busca ahora apoyos para empezar como centro de día. «Dicen que la esperanza es lo último que se pierde. Pero, a veces, muchas veces se pierde. En España hay más de 30.000 personas sin hogar en situación de calle», afirman desde la Asociación Casa Hogar de la Esperanza en su página web. A finales de abril, el colegio San Estanislao de Kostka, de la Compañía de Jesús, acogió la presentación de este proyecto: un centro de día para atender a las personas sin hogar en El Palo. En ese acto contaron con el testimonio de una persona que ha vivido en la calle y con Juan Manuel Cotelo, director de "Hagan Lío" y alma mater de la Fundación Infinito + 1. Como explica el presidente de la asociación, Fernando Ortega, «el siguiente paso es que esta iniciativa se difunda para que más personas se unan con sus donativos, como voluntarios o como socios, y para encontrar, también, el espacio físico que nos permite ubicar la Casa de la Esperanza y empezar a funcionar». Presentación del proyecto de la Casa de Acogida La Esperanza El sacerdote diocesano Gerardo Martínez es uno de los que se ha sumado a este proyecto. «No es una iniciativa nuestra, sino una llamada del Espíritu Santo que, como siempre, va creando sinergias y uniendo fuerzas. Empezó por un grupo de hermanos de Emaús que, por inquietud personal, hicieron el curso de Cáritas para estar pendientes de la gente que está en situación de calle. Desde ahí, han visto la realidad, se han acercado a los párrocos, al comedor social del barrio y a la asociación de vecinos, con el deseo de responder a las distintas situaciones que se encuentran en la calle. El objetivo es encontrarnos con estas personas que están en esta situación, para poder hacer con ellos un acompañamiento hacia una vida digna». Aunque su deseo es crear una casa hogar, el proyecto quiere empezar al menos como centro de día, para lo que están afrontando los primeros pasos. En la presentación, Juan Manuel Cotelo afirmó que «iniciativas como esta son una oportunidad de oro. No es que nosotros tengamos que ayudar a los empobrecidos, claro que sí, pero es mayor la ayuda que recibimos nosotros cuando compartimos nuestra vida con los demás que quien la recibe compartida». En ese acto habló también Jan Dudaceç, natural de la República Checa, que llegó a El Palo hace un par de años y que ha vivido en la calle hasta ahora, que está acogido en la Casa del Sagrado Corazón de la Diócesis de Málaga y es uno más de la familia del Cotolengo. Todo ello, en parte, gracias a que un matrimonio feligrés de Nuestra Señora de las Angustias, Exequiel y Pilar, y el párroco de San Juan de la Cruz, Rafael Vivancos, lo vieron y se hicieron sus “prójimos”. Puede apoyarse este proyecto mediante donativos o inscribiéndose como socios en casalaesperanza.es