NoticiaJornada Mundial de Juventud

Unidos en Cristo

Publicado: 28/01/2011: 832

•   Jóvenes de diferentes realidades eclesiales se reúnen y ponen en común su fe

Con motivo de la próxima Jornada Mundial de la Juventud en Madrid, más de 500 jóvenes, pertenecientes a las diferentes realidades eclesiales existentes en la diócesis de Málaga, acudieron el domingo 23 de enero a un encuentro que tuvo lugar en el Colegio Los Olivos, bajo el lema Haz de tu corazón la casa de todos. Era la primera vez que se unían bajo un mismo sentir, Cristo.

Con motivo de la próxima Jornada Mundial de la Juventud en Madrid, más de 500 jóvenes, pertenecientes a las diferentes realidades eclesiales existentes en la diócesis de Málaga, acudieron el domingo 23 de enero a un encuentro que tuvo lugar en el Colegio Los Olivos, bajo el lema Haz de tu corazón la casa de todos. Era la primera vez que se  unían bajo un mismo sentir, Cristo.

De cara a la JMJ  se creó una comisión formada por todas las realidades de la Iglesia (Cofradías, Movimientos, Colegios religiosos, Órdenes religiosas), que tiene la misión de preparar todo para el encuentro con el Santo Padre el próximo agosto. Dentro de la comisión se crearon diversos grupos, como el de los movimientos, que actualmente está formado por Adoración Nocturna, MAC (Movimiento de Acción Católica), el Camino Neocatecumenal y MIES (Misioneros de la Esperanza). Además, todo estuvo revisado por la Delegación Diocesana de Juventud.

Según Antonio Muñoz director del secretariado Diocesano de  juventud, la finalidad del acto es que la JMJ no quede reducida a los días de Madrid, si no que sea algo mucho más grande.   El encuentro comenzó a las 10:30 con la acogida y reparto de credenciales, a cargo de los miembros de Adoración Nocturna. Media hora más tarde comenzaban los laudes organizados por el Camino Neocatecumenal. Durante este momento de oración se habló de la misión de los creyentes y que ser cristiano es un acto heroico, pero el Señor siempre ampara y defiende “no estamos solos”.

A las 11:30 comenzó la presentación de los carismas, donde cada una de las realidades expuso en qué consiste su movimiento y la experiencia de alguno de sus miembros. Una hora más tarde tenía lugar la  “Explosión de Carismas”, diferentes talleres, donde las realidades compartían con los jóvenes sus historias y sus realidades. MIES tenía dos talleres, uno para darse a conocer y otro donde explicaban cómo viven su Fe en comunidades y los lugares donde están insertados. MAC contaba también con dos talleres, explicaban su historia, el trabajo que realizan y las zonas en las que se encuentran a través, de una exposición y vídeos.   Adoración Nocturna organizó un taller de oración para acercar este tesoro a los jóvenes. La Delegación Diocesana de la Juventud en su taller hablaba de la cruz, el icono y de la JMJ. Por último, varios jóvenes del Camino Neocatecumenal dieron sus experiencias y posteriormente cantaron salmos y alabaron a Dios por todas las maravillas que realiza.

A las 16:00 comenzó los testimonios sobre la JMJ. Y a las 17:00 la Eucaristía. El Sr Obispo, Monseñor Jesús Catalá Ibáñez, no pudo acudir porque se encontraba en el Octavario de Oración por la unidad de los cristianos, pero mandó su cariño y un gran saludo. Y la celebración estuvo presidida por Don Antonio Collado Rodríguez, vicario para la Promoción de la Fe de la Diócesis. La homilía fue intensa y dijo que hay que dar un paso al frente: “Es el momento para dar un testimonio más claro y coherente”. Y habló a los jóvenes de forma directa: “Lo importante en la vida es sentir que Jesús te dice ven y sígueme”.

También, se refirió a las críticas que actualmente recibe la Iglesia e invitó a reflexionar sobre cuál es la actitud de los cristianos ante estas situaciones: “¿Nos recluimos, nos asustamos e intentamos vivir la Fe de una manera privada para no llamar la atención o nos comprometemos con Jesús y el Evangelio?”.  La Eucarística finalizó con una gran confianza, tener presente que hay muchas y diversas formas de vivir la Fe, pero todas llevan a Dios.

Sin duda este encuentro fue una puerta hacia la esperanza un grito fuerte de los jóvenes que decían aquí estamos. Ante los duros momentos que atraviesa la Iglesia, estos muchachos y muchachas no dudaron en dar su testimonio y quedó claro que no están solos. El Espíritu Santo fue el encargado de unir a estas realidades y con Dios presente se vivieron momentos de gran comunión.   

Raquel Mora miembro de Adoración Nocturna estaba sorprendida por la cantidad de jóvenes que habían asistido: “El encuentro ha sido increíble, me ha permitido conocer grupos que desconocía como MIES y MAC”.   Y Javier Ruíz responsable de jóvenes de Adoración Nocturna en Málaga quedó sorprendido por la pujanza de algunos movimientos e hizo una reflexión: “A veces caemos en rivalidades absurdas y tenemos que asumir que la Iglesia es una”.

Blanca López del Camino Neocatecumenal dijo que este tipo de actos son necesarios: “Es importante conocernos unos a otros, saber que no estamos solos, y poder apoyarnos en Dios”.   María José Navarro (MIES) responsable provincial de la sección juvenil de Málaga comentó que la Iglesia tiene muchos carismas y desgraciadamente: “No nos conocemos, vamos muy separados, por eso este tipo de encuentros son muy importantes”.

Francisco Javier Palomo representante del MAC en la pastoral juvenil dijo que aún hay muchas cosas que compartir y que vivir juntos pero sin duda es un gran comienzo y al mismo tiempo: “Es una esperanza y una alegría que todavía los jóvenes se reúnan para compartir su fe”. Miguel de Miranda y Blanca Guerrero, representantes del Camino Neocatecumenal en la comisión de la JMJ, manifestaron su alegría por el encuentro: “Un gran acto donde se vio la presencia y  acción del Espíritu Santo y la importancia de que los jóvenes reciban una palabra de vida, que los lleve a vivir aquí en la tierra como peregrinos hacia el Cielo”.

Don Antonio Collado, vicario, afirmó estar sorprendido, animado y esperanzado: “Que más de 500 jóvenes, un domingo se reúnan en torno a la Palabra y convocados por la Iglesia es para mí un signo de esperanza total, es el Espíritu Santo el que sigue tocando el corazón de lo jóvenes”.   Y el sacerdote diocesano Miguel Ángel Gamero miembro de la Delegación Diocesana de la Juventud se refirió al evento de una forma muy positiva: “Es sin duda una forma de mirarnos todos, hablar un mismo lenguaje, cada grupo expresa la Fe como la vive, sabiendo que el fundamento de todo es Jesucristo”.

Está claro los jóvenes apuestan y seriamente por un camino concreto, Dios y tienen claro la importancia de la Fe en sus vidas. Adrián Cobo (MIES) habla con seriedad sobre su elección: “Un día te das cuenta que no sólo hay que seguir lo que te plantea la sociedad, si no que piensas, ¿qué quiero para mí? y dices Cristo. Para mi Cristo es el que me marca el camino”. José Manuel Vela responsable general del MAC lo tiene claro: “Lo mejor que me ha pasado ha sido descubrir al Señor, la belleza de la Fe ".

 Francisco Durán del Camino Neocatecumenal ofreció un testimonio sincero: “Experimento en mi vida que Dios me quiere, sobre todo en mi familia porque somos once hermanos y el Señor actúa todos los días en mi casa. Veo que todo lo que me ocurre en la vida es un regalo de Dios”.   Y ahora toca prepararse para la gran JMJ,y D, Antonio Collado anima a los jóvenes a participar en la Jornada por dos razones, en primer lugar, para que se encuentren con el Señor profundamente y para que se animen al ver que hay  creyentes como ellos en todo el mundo.

Sin duda, este encuentro fue un gran acontecimiento que permitió a los jóvenes compartir una esperanza, pero sobre todo puso de manifiesto la grandeza y el poder del Espíritu Santo, que toca el corazón de los jóvenes y los lleva hacia una camino lleno de amor.    Y como decía la segunda lectura de la Eucaristía: “Poneos de acuerdo y no andéis divididos. Estad bien unidos con un mismo pensar y sentir” (1Corintios 1,10-13.17).  Porque este encuentro es sólo el comienzo.

Autor: Ana Vicaría Guerrero

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