NoticiaSemana Santa El legionario, por Francisco E. García, O.P. Publicado: 02/04/2012: 2503 La fe se vive como un sentimiento, una idea abarcadora, una experiencia que lo puede todo, lo mide todo, lo pesa, lo valora. Toda la experiencia humana se ve distinta desde la fe. Te da el color en tu vida y te da la fuerza para sobrevivir. Mi experiencia con los Caballeros Legionarios ha sido enriquecedora, uno les mira o les admira, o puede que lo que la gente vea en ellos durante las guardias al Cristo de la Buena Muerte o en el Traslado del Cristo o en la Estación de Penitencia sea puro espectáculo, pero no. Hay más. A través de la confesión he aprendido a valorar la fe de los Legionarios, el amor a Cristo, la certeza puesta en Él, la confianza de estar cerca, de valorar esa cercanía, en el corazón, en la memoria, en el tener el honor de cargar con su Imagen, en llevar la medalla o una pequeña Cruz, o una estampa en la cartera cuando parten a las misiones de riesgo. Sí, no todo es folclore, hay fe, hay amor, hay emoción, hay lágrimas que arrancan la necesidad de sentirse perdonados y protegidos por su Cristo. Y esto vale, y da valor al hombre, valor para ser incluso “un novio de la muerte”. Autor: Francisco E. García, O.P., director espiritual de