DiócesisComentario al Evangelio

Comentario al evangelio de la Solemnidad de Pentecostés

Publicado: 22/05/2015: 1096

Mariela Martínez Higueras, religiosa dominica, ayuda a profundizar en el evangelio de este domingo.

En el evangelio, Jesús se aparece a algunos de los suyos y les hace el regalo de su paz. Junto a ella, brota en los discípulos la alegría al reconocer al Maestro. A continuación, el Señor les encomienda una tarea, los envía a la misión como el Padre lo envió a él. Los introduce así en la cadena de envío, haciéndolos partícipes del proyecto del Padre. Para esto no van a estar solos. Jesús sopla sobre ellos su Espíritu. Al igual que Dios sopló su aliento creador en el Génesis (Gn 2,7), Jesús con su Espíritu crea y re-crea su Iglesia. éste hará que la comunidad eclesial no quede fosilizada en un tiempo o unas categorías, sino que esté en permanente “re-novación”. Para que esto ocurra, es necesario que los discípulos reciban el Espíritu, que lo acojan y le dejen realizar su misión. El Resucitado también les da un poder: el poder de discernir en los procesos de reconciliación de los seres humanos: perdonar o retener los pecados. Para esta tarea de discernimiento, nada fácil, la luz del Espíritu les guiará.

Hoy, Jesús nos ha enviado su Espíritu. De su acogida en nuestras vidas y en nuestras comunidades dependerá que ese aliento vaya “re-creándonos”, “re-novándonos”, “re- vitalizándonos”: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas (Ap 21,5). Tenemos una gran labor: hemos sido llamados/as a ser partícipes de la misión de Jesús y de la reconciliación de los seres humanos: consigo mismos, con los otros y con Dios. «Si no podemos poner fin a nuestras diferencias, contribuyamos a que el mundo sea un lugar apto para ellas» (J. F. Kennedy).

Mariela Martínez

Religiosa dominica, doctora en Teología

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