En la Biblia leemos, en el libro del Éxodo, que el pueblo de Israel caminó durante 40 años para llegar a la tierra que Dios le había prometido, el profeta Elías peregrinó durante 40 días para encontrarse con Dios en el Monte, Cristo ayunó 40 días antes de empezar su vida pública. Es un tiempo de preparación para un acontecimiento importante. Para nosotros la cuaresma nos prepara para la pascua, la resurrección del Señor.

¿Qué nos pide la cuaresma?

Lo que Jesús hizo en el monte fue rezar y ayunar, privarse de algunos alimentos. Algunos dicen que el ayuno, esas privaciones que nos pide la Iglesia, ya no tienen sentido, para que lo tenga es necesario que ese dinero que no gastamos, se lo demos a los que lo necesitan por ejemplo a Cáritas.  En cuaresma tenemos que leer la Palabra de Dios y meditarla, pensar lo que nos dice. Nos ayudará, también hacer el Vía Crucis, recorriendo el camino de Cristo hasta la cruz

La cuaresma es un tiempo muy bueno para recibir el sacramento de la Reconciliación, la confesión; allí Cristo nos perdona y nos preparamos mejor para celebrar su Resurrección, por eso en todas las parroquias hay celebraciones comunitarias de la penitencia.  Vivir así la cuaresma nos prepara para celebrar el Domingo de Resurrección, el Domingo más importante para los cristianos, ya que en ese día renovaremos nuestras promesas bautismales dando gracia a Dios que por el bautismo nos ha unido a Jesucristo que murió y resucitó para salvarnos. Por eso en la Pascua de Resurrección cantamos ¡Aleluya!