NoticiaActualidad Un siglo de amor por las calles de la ciudad Publicado: 13/06/2015: 11144 Hace 100 años (junio de 1915) que el Padre Arnaiz sacó a las calles de Málaga la procesión de la imagen del Sagrado Corazón, tras 14 años sin salir por circunstancias políticas y sociales adversas. Desde entonces, esta cita anual es una de las más esperadas por cientos de fieles. Este año tuvo lugar el domingo, 14 de junio. El padre jesuita Manuel Cantero nos explica que el documento básico de la devoción al Corazón de Jesús es la Carta Encíclica de Pío XII “Haurietis aquas” [Sacaréis aguas con gozo], en la que se indica que «no es una mera o popular devoción, sino una forma de culto al amor de Dios en la persona de Jesús». El culto se tributa al amor divino y humano del Corazón de Cristo, que pone de manifiesto el amor eterno de Dios y esto queda reflejado desde el Antiguo Testamento. «Los fundamentos de este culto de adoración al Corazón del Salvador, pueden encontrarse en Oseas, Isaías, el Cantar de los Cantares...», explica el Padre Cantero siguiendo la Carta de Pío XII, «y en el Nuevo Testamento, en la persona y obra misma de Jesús. El costado abierto del Crucificado, con el corazón físico de Jesús partido por la lanza y manando sangre y agua, es punto central en este culto al Sagrado Corazón de Jesucristo, cuya naturaleza humana estuvo “indisolublemente” [hipostáticamente] unida a la divina». Edad Media Esa mirada al Corazón traspasado del Salvador llegó a ser objeto de culto especial como imagen del amor divino y humano del Verbo encarnado a partir –sobre todo- de la Edad Media con san Buenaventura, san Alberto Magno, santa Gertrudis, san Pedro Canisio, san Francisco de Sales y, muy particularmente, san Juan Eudes. La concesión de solemne fiesta litúrgica en honor del Corazón de Jesús data de 1672. «Un momento importante para la difusión de este culto se dio con santa Margarita María de Alacoque y la ayuda de san Claudio de la ColombieÌ€re, como forma que se distingue de las demás expresiones de la piedad cristiana, concediéndose la definitiva aprobación pontificia para toda la Iglesia en 1856», explica Cantero. Apóstol español España tuvo un apóstol del Sagrado Corazón de Jesús en el beato Bernardo Francisco de Hoyos, un jesuita que murió joven, con 24 años, y que tuvo un ferviente apostolado del culto al Corazón de Jesús. El P. Gallifet le pidió que le copiara de un libro unos párrafos sobre el tema y quedó sobrecogido de tal forma que se dedicó a propagar la devoción valiéndose de estampas, que era el soporte gráfico de aquellos tiempos. El papa Benedicto XVI, en el 50 aniversario de la “Haurietis aquas”, afirmaba que «el fundamento de esta devoción es tan antiguo como el cristianismo. En efecto, sólo se puede ser cristiano dirigiendo la mirada a la cruz de nuestro Redentor, “al que traspasaron”». En Málaga Según la experiencia vivida por el Padre Cantero, «este culto y devoción cala mucho en el pueblo, y Málaga lo vive. Sus manifestaciones son muy variadas, desde las que se centran en las imágenes del Corazón de Jesús y expresiones externas de piedad, hasta las diversas formas de participación en una de las modalidades que lo hacen más extenso: el Apostolado de la Oración, con las oraciones de petición por las intenciones del Papa y los Obispos, en las que están expresamente enroladas muchas parroquias, centros de diversa índole, comunidades religiosas y particulares». En Málaga, el Apostolado de la Oración se reúne los primeros viernes de mes en un acto de formación y los terceros viernes en una escuela de oración, en la iglesia del Sagrado Corazón. Como el Padre Arnaiz hace ya un siglo, muestran el amor de Dios a través del Corazón traspasado de su hijo.