NoticiaActualidad Álora recuerda a una gran mujer Publicado: 03/03/2010: 1254 La parroquia de Ntra. Sra. de la Encarnación de la localidad está celebrando desde el pasado lunes y hasta el próximo viernes una semana dedicada a la figura de Laura Aguirre. El sábado 6 de marzo se celebra una Eucaristía en su memoria a las 19.00 h en la Iglesia de la Encarnación. Laura Aguirre Hilla, nació en Málaga, el 23 de Febrero de 1.901. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Madrid y en la academia de Bélgica en el extranjero. Hablaba perfectamente el francés y con su preparación le esperaba un brillante porvenir, el cual abandona, para entregarse totalmente a los más necesitados. Desde Ronda vino como misionera del Padre Arnáiz, hasta el pueblo de Álora, en el Año Santo. En este pueblo de Álora, comienza su extraordinaria labor fundando un Orfanato con un grupo de tres niñas. Esto ocurría el día 31 de Diciembre de 1.950, siendo alcalde de este pueblo Antonio Trujillo, quien le consiguió para sus huérfanas una casa que había servido anteriormente de Auxilio Social. El Párroco de Álora era Miguel Martín García y también colaboró cediéndole los aledaños semidesnudos del Santuario de Flores, adecentándolo con los escasos medios económicos de que se disponía en esos años. Y allí se estableció la Srta. Laura con sus primeras niñas el 2 de Julio de 1.953. En el año 1959, Laura había conseguido para 11 de sus huérfanas una subvención de 2.300 pesetas de la Protección de Menores; para otras 3 niñas del Tribunal de Menores, otras de 700 pesetas, y el resto se sostenía con una suscripción de 700 pesetas entre las personas del pueblo. Se ayudaba también con lo que obtenía de las “Tómbolas” que organizaban y del trabajo de la industria de la “pleita”. Se le habían unido algunas compañeras, que se consagraron a la misma misión. De ellas sobrevive una, Socorro Sánchez, hoy en estado senil, con 95 años, que es atendida con los otros ancianos en la misma residencia que fundaron, inicialmente para niñas. En los años 70, con la ayuda del párroco, a la sazón Francisco Ruiz Salinas, los voluntarios de Cáritas Parroquial y un buen número de colaboradores, se las ingeniaron para conseguir un solar en el pueblo, y edificar una nueva casa para las niñas, que perdura hasta hoy, aunque reconvertida en residencia de ancianos, y gestionada, desde hace 20 años por las Hermanas Franciscanas de Jesús Nazareno. La atención a las niñas se dejó como labor en el año 2000 al haber cambiado por completo la situación social de los más necesitados. Laura Aguirre murió en Álora el 31 de Diciembre de 1986. El Obispo, Don Ramón Buxarráis, en la Eucaristía que ofreció por su alma, comentó la exclamación unánime del pueblo de Álora: “¡Qué cacho de Gloria le habrá correspondido a la Srta. Laura”¡ Y dijo el Prelado, no menos campechano: “Pocas oraciones va a necesitar Laura para instalarse en el Cielo.” En el recordatorio de su muerte se leía: “Su figura sencilla, su hablar suave, su vida humilde, su entrega al prójimo… Este fue su testimonio y Cristo, su fortaleza.”. Se volcó en el servicio de los demás pues buscando el Rostro Vivo de Dios, lo encontró en los necesitados de Álora, donde pasó haciendo el bien con la autoridad que le venía de la coherencia de su propia vida y la fe que profesaba. Autor: diocesismalaga.es