La Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, a través del área de Desarrollo Solidario, ha publicado la memoria anual de la acción social que desarrolla en sus centros de la Comunidad de Madrid, Andalucía, Extremadura y Canarias, donde se han llevado a cabo más de 250.000 atenciones sociales para mejorar las condiciones de vida de 55.017 personas.

El despliegue de la Obra Social realizado durante el año 2016 ha sido posible gracias a la labor de los 1.147 voluntarios con los que cuentan sus centros sociales, sanitarios y asistenciales distribuidos en la provincia Bética; el apoyo de los 9.500 socios y colaboradores económicos y  de las más de 800 empresas que se acercan hasta la Orden para contribuir a la lucha contra la pobreza. El director de Desarrollo Solidario de San Juan de Dios, Ignacio Romero, explica que “en los últimos años la Orden Hospitalaria ha redoblado sus esfuerzos y recursos en la búsqueda de soluciones reales para mejorar la calidad de vida de las personas y colectivos en situación de vulnerabilidad, buscando la complicidad de personas, entidades empresas e instituciones. La apertura de nuevos dispositivos sociales nos ha permitido pasar en apenas 3 años de unas ayudas en nuestra acción social de 2 millones de euros a más de 5 millones”.

La memoria de Desarrollo Solidario de San Juan de Dios expone que han sido más de 5,4 millones de euros los fondos destinados a programas sociales y de cooperación internacional. De esta cifra, casi la mitad, un 47 por  ciento, ha financiado proyectos para la atención a la exclusión social, ya que el 73 por ciento de las personas atendidas en alguno de sus dispositivos se encuentran en situación de pobreza o exclusión social.

En cifras concretas, este tipo de atención para personas sin recursos económicos se traduce en 90.140 comidas servidas en los comedores sociales de Ciempozuelos, Sevilla y Granada; y 13.954 lotes de alimentos entregados a las familias en situación de vulnerabilidad, lo que suma un total de 81.118 kilos de alimentos entregados en los centros. Entre los proyectos de garantía alimentaria de la Orden destacan también los economatos sociales de las localidades de Jerez y Almendralejo que, conjuntamente, atienden a más de 1.400 familias.

Además de lo mencionado, la atención a la exclusión social se lleva a cabo a través de proyectos de ayudas para la pobreza energética o residencial en todos los hospitales de la Orden, la farmacia social, la atención bucodental, servicios de ropería y calzado y dietas para usuarios, acompañantes y familiares de enfermos sin recursos.

En cuanto a los datos de inserción social y laboral, durante todo el año los trabajadores sociales de la Orden de San Juan de Dios han llevado a cabo 5.200 entrevistas para programas de información y orientación social, se han contabilizado 2.925 estancias en programas de rehabilitación social y se han realizado 731 atenciones sociales en programas de reinserción social.

En el extremo de la exclusión social, se encuentran las personas sin hogar, y es por esto y porque son el 10 por ciento de las personas atendidas por la Obra Social de San Juan de Dios, por lo que la Orden lo considera un ámbito de intervención social específico en el amplio espectro que cubre, a través de dispositivos sociales específicos como el Centro de Acogida San Juan de Dios en Málaga capital.

Han sido 904 personas las beneficiarias de algunos de sus proyectos de atención social y orientación; 15.367 las acogidas que se han llevado a cabo en sus centros durante el pasado año; y 3.359 las atenciones sanitarias, de higiene y vestuario realizadas.

En cuanto al ámbito de intervención en la infancia, se han atendido a 1.841 familias, llegando así a 2.762 niños. Algunos de los programas que se llevan a cabo con los pequeños de familias en situación de vulnerabilidad consisten en ayudas a la higiene y alimentación infantil, apoyo a madres solteras, campamentos de verano, talleres infantiles, o financiación del trasporte y comedores escolares. Además, San Juan de Dios ha concedido 282 becas en 2016 para el servicio de apoyo psicopedagógico en niños con trastornos y mayores de 6 años y 1.198 ayudas para material ortoprotésico y material escolar.

En lo relativo a la actividad llevada a cabo con personas mayores, San Juan de Dios dispone del 19 por ciento de las plazas de sus residencias cofinanciadas por la obra social para aquellas personas que no disponen de recursos económicos pero que necesitan de estos cuidados.

La discapacidad es otro ámbito históricamente cubierto por la obra social de San Juan de Dios. En 2016 han sido 90 las personas con discapacidad empleadas en los dos centros especiales de empleo que tiene la institución, uno en Ciempozuelos, en Madrid, y otro en Alcalá de Guadaíra, en Sevilla.

En este contexto, se imparten talleres ocupacionales, musicoterapia, viveros y huertos terapéuticos, campamentos de verano y salidas de ocio, se becan estancias en centros dedicados a la atención a la discapacidad, se pone a disposición de los usuarios pisos de integración y se procura su inserción laboral.

La Orden se ha dedicado también, desde siempre, a las personas con problemas de salud mental, y también en este ámbito realiza su intervención el área de Desarrollo Solidario, ya que, por ejemplo, solo el 14 por ciento de las personas que padecen algún problema de salud mental tienen empleo y 2 de cada 5 asegura haber sufrido algún tipo de discriminación laboral a lo largo de su vida.

San Juan de Dios, desde su Obra Social, puso en marcha en 2016 estancias becadas en sus centros para personas que, además, carecen de recursos económicos, terapias acuáticas y asistida con animales, pisos de integración y talleres laborales y formativos que pusieron a disposición de estas personas más de 300 plazas en los cinco dispositivos de la Orden para su atención.

El Voluntariado, un valor social en alza

Durante los últimos 4 años, el número de voluntarios de San Juan de Dios ha crecido más de un 57 por ciento, llegando a los 1.147 que se reparten hoy por los centros de la Provincia Bética, que se encuentran en la Comunidad de Madrid, Andalucía, en Extremadura y Canarias. Esto la sitúa entre las diez primeras organizaciones en número de voluntarios en España.

La Orden ha impartido más de 120 sesiones formativas dirigidas a los equipos de voluntariado, dependiendo del ámbito al que destinen su tiempo y labor.

La actividad del voluntario así como la contribución del bienhechor o donante es, históricamente, uno de los pilares de la Orden, pues cuando el Fundador de la institución, Juan de Dios, comenzó su labor de atención a los más pobres y enfermos de Granada, se valió de la ayuda de personas que veían en su labor una causa justa y buena. Por eso, antes de ser santo, Juan de Dios recorría Granada buscando donativos y haciendo ver las necesidades a las familias acomodadas, aquellas que financiaron en mucho su actividad social.

“En la Orden Hospitalaria seguimos trabajando para promover la solidaridad con el fin de poder ofrecer una atención integral que tenga en cuenta las diferentes dimensiones de la persona, fomentando la dignidad y la autonomía personal, sensibilizando a la sociedad para romper con los estigmas y fomentando la inclusión social de los colectivos más desfavorecidos”, concluye Ignacio Romero.