La Teología hay que aterrizarla en la vida, concretarla con la iluminación del Espíritu Santo. Desde que somos pequeños, la formación ayuda a afrontar la vida y sus responsabilidades. También como cristianos. ¿Qué problema ven algunos en la formación teológica? ¿Se entiende que quien está al frente de una responsabilidad eclesial: sacerdote, catequista o hermano mayor de una cofradía... debe tener conocimientos de Teología a la luz de la oración?