La celebración del 90 cumpleaños del capellán de la Residencia de las Hermanitas de los Pobres de Ronda tuvo lugar durante la Eucaristía que presidió el arzobispo de Toledo, Mons. Francisco Cerro, en la Iglesia de Santa María la Mayor de Ronda, durante el congreso mariológico de Ronda.

Al término de dicha Misa, el sacerdote Salvador Aguilera leyó el texto de la bendición apostólica en la que el Papa Francisco felicitaba cordialmente a D. Alonso y afirmaba unirse «a la acción de gracias a Dios por los muchos dones recibidos en este tiempo y por su ejemplar fidelidad y amor sincero a Jesucristo y a la Iglesia, rogando al Señor siga derramando sobre él la abundancia de su gracia para perseverar con el mismo tesón y entusiasmo en la extensión del reino de Dios invocando el auxilio maternal de la Virgen María y en prenda de la asistencia divina que le acompañe siempre», extendiendo su bendición apostólica a todos sus familiares y a los asistentes a la celebración.

Por su parte, el sacerdote nonagenario, nacido en Jimera de Líbar, afirmó sentirse «rondeño, participando en lo que puedo en todas las actividades que se organizan». 

«Mi vida ha sido un don y una gracia de Dios Nuestro Señor –confesó–. Por tanto, todo lo bueno que he podido ralizar en mi vida es obra de Dios Nuestro Señor». Este histórico párroco de diversas comunidades de Ronda y Serranía, revalidó su compromiso con el pueblo y agradeció a Dios por el cariño recibido en su larga trayectoria: «El Señor me ha concedido la gracia de estar acompañado de mis familia en toda mi vida sacerdotal. Ahora voy a seguir dedicándome a los amigos que sois todos vosotros, todo el pueblo de Ronda y los pueblos en los que yo he participado», dedicando sus últimas palabras a la patrona de Ronda: «¡Viva la Virgen de la Paz!».