NoticiaPatrimonio Un patrimonio de todos que hay que cuidar Publicado: 28/07/2022: 7561 Protemplos Como todos los veranos, la Iglesia de Málaga aprovecha la gran afluencia de visitantes para lanzar su tradicional jornada protemplos, cuyo día central se celebrará bajo el lema “Entre todos” el domingo 14 de agosto. El ecónomo diocesano, Rafael Carmona, explica su importancia para sostener el rico patrimonio eclesial La aprobación por parte de la Junta de Andalucía del proyecto de tejado para la Catedral, que permitirá poner fin a sus históricos problemas de filtraciones, ha vuelto a concitar el interés de los malagueños por el mantenimiento de su patrimonio histórico artístico. Pero este cariño no se limita solo al principal monumento de la provincia, sino que se extiende a múltiples templos: parroquias, iglesias, capillas y ermitas que son, en casi todas de las ocasiones, el mayor tesoro de cada barrio y de cada pueblo. «La Jornada tiene como finalidad crear conciencia comunitaria de la importancia de nuestras iglesias y ermitas para ayudar económicamente a su restauración» –explica el ecónomo diocesano, Rafael Carmona–. Para este diácono permanente, los templos y ermitas no son solo edificios de mayor o menor valor arquitectónico, sino que «son lugares para detenerse y descansar en el largo camino que lleva a Cristo. Son lugares donde, mediante la fe sencilla y humilde de los pobres de espíritu, se vuelve a tomar contacto con las grandes riquezas que Cristo ha confiado a la Iglesia, especialmente la palabra de Dios, los sacramentos, la misericordia, la caridad para con los hermanos que sufren y los enfermos. En las ermitas dedicadas a la Virgen, individuos y pueblos enteros buscan el encuentro con la madre del Señor para consolidar la propia fe en el ámbito de la presencia materna». Entre las últimas restauraciones realizadas, destacan las de la ermita de la Santa Vera Cruz de Alhaurín el Grande y las parroquias de Frigiliana, San Miguel de Antequera y los Santos Mártires Ciriaco y Paula, en la capital. El patrimonio eclesial de nuestros pueblos y ciudades es, en ocasiones, su principal baza turística, por eso los vecinos y los ayuntamientos aúnan esfuerzos para recuperar los templos que sufren el deterioro propio de siglos de historia. Para Pablo Pastor, arquitecto técnico responsable de las obras que realiza la Diócesis de Málaga, «la actitud de colaboración de las administraciones locales, sean del color político que sean, es muy buena tanto en los municipios pequeños como en los grandes. Por ejemplo, en Torrox, donde vamos a acometer el arreglo de la cubierta de la ermita de Ntra. Sra. de las Nieves con un convenio con el ayuntamiento; en Frigiliana, donde se va a proceder al arreglo del interior de la parroquia; en Rincón de la Victoria, con la restauración de la antigua iglesia de la Cala del Moral o en Ardales, que va a arreglar la fachada de su parroquia». Entre las intervenciones más urgentes que hay que realizar, Pastor destaca «la iglesia de Daimalos, en el municipio de Arenas, que está cerrada por peligro de desprendimiento de su armadura mudéjar; la fachada del templo de Sierra de Yeguas, también con riesgo de caída de una cornisa; la fachada del templo parroquial de Cuevas Bajas o la iglesia primitiva de los Dolores del Puerto de la Torre». En cuanto a las obras en ejecución o recientemente finalizadas, el arquitecto técnico señala las de «las nuevas solerías de los salones parroquiales de la Esperanza y San Eugenio Mazenod, así como del templo de la Amargura, en la capital; la eliminación de barreras arquitectónicas en la iglesia de Nueva Andalucía en Marbella; el arreglo de unos pilares en San José Obrero; la mejora de la accesibilidad de la iglesia y dependencias parroquiales de la Iglesia del Carmen en Málaga y distintas reparaciones en la capilla de San Luis de Sabinillas o en la parroquia malagueña de San Fernando». Obras que solo sería posible acometer con la colaboración de miles de personas como las que, cada año, depositan su sobre para este fin en la colecta protemplos. El 14 de agosto, en cada parroquia, tenemos una cita.