NoticiaPentecostés Con el Evangelio puesto Publicado: 31/05/2017: 13769 Pentecostés 2017 En esta fiesta de Pentecostés, Día de la Acción Católica y del Apostolado Seglar, celebramos la llamada universal de todos los bautizados a la misión. La Iglesia invita a los laicos a ser “evangelios vivos” capaces de llevar impresa en sus vidas la Palabra de Dios para transmitirla allá donde el Espíritu les lleve: familia, trabajo, escuela... Pentecostés: fiesta del laicado La Delegación de Apostolado Seglar invita a todos los fieles a participar en la Eucaristía que presidirá el Sr. Obispo, este domingo día 4, en la Catedral, a las 11.30 horas. Tras la misma, se celebrará un sencillo gesto misionero emulando la primera predicación de la Iglesia el día de Pentecostés. Será en la aledaña calle Postigo de los Abades. Desde la Delegación se invita a las comunidades parroquiales a realizar gestos parecidos en sus respectivos barrios y pueblos. Francisco Castro. Delegado Diocesano de Apostolado Seglar Las asociaciones y movimientos de apostolado seglar tienen, en su diversidad, una sola tarea: suscitar y sostener cristianos maduros, testigos de Jesucristo en medio de nuestra sociedad. Son una realidad providencial en esta época de nuestra Iglesia, de la que el papa Francisco hace un diagnóstico severo: falta ardor evangelizador. El remedio: hacen falta “evangelizadores con espíritu”. En efecto, Jesús resucitado dijo a sus discípulos: «recibiréis la fuerza del Espíritu Santo que va a venir sobre vosotros y seréis mis testigos...» (Hch 1,8). De este modo, Jesús nos advierte acerca de los presupuestos de la misión. Nos previene contra el activismo, que confía en las propias fuerzas, recursos y proyectos, y está vacío de la fuerza y el sentido que solo el Espíritu del Señor puede dar. Nos pone alerta también contra los personalismos y estructuralismos: el verdadero protagonista de la misión es el Espíritu Santo, que nos es dado para guiar y fortalecer nuestros pasos, siempre en la dirección de una mayor comunión misionera. Una verdadera corresponsabilidad de los laicos en la vida y la misión de la Iglesia solo es posible desde una madurez cristiana y eclesial. "Salir, caminar y sembrar..." La Comisión Episcopal de Apostolado Seglar ha elaborado un mensaje y unos materiales muy completos para esta jornada. Varios miembros de la Delegación Diocesana de Apostolado Seglar señalan sus puntos más destacados. Un mensaje que es vida. Gregorio Chamorro Sierra pertenece a la asociación Misioneros de la Esperanza (MIES) y pertenece al equipo de la Delegación de Apostolado Seglar. «Del material para la reflexión que nos mandan desde la Conferencia Episcopal, me vuelven a impresionar las palabras que toma de la Evangeli Gaudium: “Salgamos, salgamos a ofrecer a todos la vida de Jesucristo. (…) Prefiero una Iglesia accidentada, herida y manchada por salir a la calle, antes que una Iglesia enferma por el encierro y la comodidad de aferrarse a las propias seguridades” (EG, n. 49). Nuestros obispos nos recuerdan que no solo llevamos un mensaje que no es nuestro sino de Jesucristo; sino vida, la vida auténtica, a este mundo que malvive o muere sin haber vivido. Y esto con muchísima alegría. Nuestras comunidades, dejándose llevar del Espíritu Santo, deben proyectar una forma de vivir que llame la atención, que provoque que la gente que nos rodea comience a cuestionarse: “¿Por qué son así?” y “¿Podría ser yo igual?”. Superar el clericalismo. Mabel Márquez Recio y Nacho Caro López son matrimonio y pertenecen a la comunidad diocesana María de Nazaret en la parroquia Sta. Mª de la Amargura. Mabel es tesorera en la Delegación de Apostolado Seglar y Nacho es el responsable de redes sociales. «La primera idea que nos llama la atención es la de superar el clericalismo que hay en la Iglesia para ser protagonistas de la evangelización hoy. Con conciencia de que Dios nos ha llamado para una misión, una misión encargada personalmente a cada uno de nosotros y que está fuera de las parroquias y movimientos; insertos en lo más hondo de la sociedad (puestos de trabajo, familias, amistades, comunidades de vecinos, etc) para mostrar con actos y palabras que tenemos algo que da Vida a nuestras vidas, que nos hace felices, y que es Jesús. La segunda idea que nos impulsa y nos llena de motivación es la de sacar el Evangelio del ámbito de lo privado, mostrar la fe que llevamos dentro en el día a día, en una sociedad cada vez más secularizada y falta de valores y sentido de la vida para transformar nuestro mundo». La insignia del servicio. Mª del Carmen Ledesma Albarrán es hermana mayor de la Cofradía del Amor y la Caridad y colaboradora de la Delegación del Apostolado Seglar. «Como cristianos, estamos llamados a hacernos presentes en nuestras realidades y a ser transmisores de todo el amor que hemos recibido. Cada uno desde nuestra idiosincrasia y con la alegría de sentirnos hijos de Dios, debemos cumplir nuestra misión que no es otra que la de amar al prójimo. Nuestra actitud de servicio debe ser nuestra gran insignia, da igual en el ámbito que compartamos nuestra fe. Con solo mirar a nuestro alrededor contemplamos las necesidades con las que viven muchas personas hoy en día. Si unimos nuestros esfuerzos, nuestras acciones se multiplican y nos permiten afrontar grandes retos. Los cofrades somos testigos de la importancia de este hecho y gracias a esta unión sentimos el orgullo de haber hecho realidad un proyecto de atención a las necesidades básicas de muchas familias, aunque la responsabilidad y el compromiso no se queda ahí, lo que cuenta son las acciones y hay mucho camino por recorrer».