NoticiaFundación Victoria

“Hay que movilizar a los alumnos para que estén en constante proceso de aprendizaje”

Publicado: 24/05/2012: 837

Educar a las personas en su totalidad. Ese es uno de los principios del proyecto educativo de la Fundación Diocesana Santa María de la Victoria de Málaga. Esa filosofía la siguen recogiendo ahora en las conclusiones que se han derivado del II Congreso “Educando en familia”. Así lo asegura la delegada Diocesana de Enseñanza, Carmen Velasco, que valora el encuentro de muy positivo.

- ¿Qué valoración hace del desarrollo del congreso?

- Muy positiva por número de participantes, por la profundidad que han tenido las ponencias y las comunicaciones, por que el profesorado de la Fundación ha trabajado muchísimo y porque ha sido un acto en el que la sociedad de Málaga ha reconocido la inmensa tarea que la iglesia Diocesana lleva haciendo hace 100 años y hay mucha gente en Málaga que gracias a las escuelas rurales y a las escuelas de la Fundación pudieron estudiar cuando antes los estudios sólo eran para los de la capital. Estamos muy satisfechos.

- La participación ha sido masiva, no sólo de personal de la Fundación, sino también de otras instituciones educativas. ¿Se convierte así la Fundación en referente de otros centros?

- En total han participado 1.100 personas, pero el grueso han sido profesores de la Fundación, unos 400. Luego se abrió la posibilidad de que participara personal de otros centros y lo han hecho equipos directivos de La Goleta y la Academia Santa Teresa de las Teresianas, entre otros, pero fundamentalmente de centros católicos. Hay que tener en cuenta que somos la institución educativa más grande de Málaga y de la provincia, con 100 años a las espaldas, con mucho trabajo hecho. La tradición y la experiencia son amplias.

- ¿Cómo valora la respuesta de los congresistas a las ponencias expuestas por personas como del Cardenal Cañizares?

- Han sido ponencias “cum laude”. Los participantes están muy satisfechos y creo que una de las claves para que lo estén es que han sido muy prácticas. Se trata de ponentes con una gran fundamentación teórica que han sabido aterrizar en la realidad y eso es lo que le gusta a los maestros. También hay que destacar que han sido ponencias que te hacían mirar para adelante con ganas, con cariño, con innovación, apostando e implicando.

- ¿A qué conclusiones se ha llegado en este congreso?

- Ha habido unas conclusiones de declaración de principios. Además el comité científico, que está formado por los jefes de estudios de todos los colegios de la Fundación, con las conclusiones que se han recogido de las mesas de trabajo van a elaborar un documento que irá a pleno para su aprobación. Las conclusiones van en la línea de la identidad y de la ilusión. Concretamente son 10, que son los ejes sobre los que queremos seguir trabajando. Algunas son desde los inicios de la Fundación y otras son fruto de la renovación, la andadura y los cambios de los tiempos.

- Una de las conclusiones es seguir apostando por la educación integral del alumno. ¿Qué se quiere decir con educación integral?

- Estamos hablando de la persona entera, de su lenguaje, sus relaciones, su fe, su creatividad…de todo, por que las personas no sólo somos cabeza. Todo eso hay que desarrollarlo y por eso el club deportivo, la  banda de música, los campamentos, el bilingüismo…, por que hay que educar a la persona en su totalidad.

- ¿Cómo se consigue estar a la altura de los retos que plantea la sociedad del siglo XXI?

- Precisamente dos de las ponentes del congreso, la hermana Monstserrat del Pozo y Olga Casanova, decían que hay que querer a los alumnos. Se consigue con un cariño inmenso, un trabajo incansable, trabajo en equipo e investigación educativa.

- Aprender a aprender es una de las líneas que la Fundación quiere seguir no sólo con el alumnado, sino también con el profesorado. ¿Cómo se consigue este objetivo?

- En esta sociedad en la que vivimos en la que estamos bombardeados por información hay que convencer a alumnos y profesores, pero fundamentalmente a los alumnos de que saben muchas cosas y que sobre eso que saben hay que seguir construyendo. La sociedad de hoy requiere que se esté continuamente en proceso de aprendizaje y hay que movilizar a los alumnos para que estén constantemente en proceso de aprendizaje. No es tarea fácil, pero tiene que ser así. Estudiar es también un trabajo y como todos los trabajos cuesta, así que hay que hacerles despertar el gusto por esas cosas que ellos piensan que no le sirven de nada, pero que a la larga sí sirven.

- Si algo se ha destacado en el encuentro es la necesidad de que los padres se impliquen en el proyecto educativo ¿Cómo se fomenta su participación?

- Hay un punto de partida básico y es que los padres quieran llevar a sus hijos a ese proyecto educativo. Además, a los padres también hay que hacerles cómplices del proceso y esa complicidad se crea hablando, con cercanía, haciéndolos participar y, en algunos casos, hasta obligándolos a participar. Hay que implicar a las familias en las actividades del colegio. Hay que tener en cuenta que la tarea educativa no es fácil, así que también hay que ayudarles a saber que se educa mejor poniendo límites y que se ayuda a crecer premiando en su justa medida.

- El proyecto educativo de la Fundación persigue “obtener el alumno que queremos”. ¿Cómo es ese modelo de alumno?

- Lo primero es una persona feliz y que de sí todo lo que pueda dar. Fundamentalmente perseguimos que tengan una base muy bien preparada para que esa persona se pueda desarrollar en los niveles de la fe y el compromiso y eso hay que cultivarlo desde que el alumno entra en el colegio hasta que sale.

Autor: Inmaculada Prieto

Más noticias de: Fundación Victoria