A las 5 de la tarde llegaba D. Jesús al templo de San Miguel, donde fue recibido por el Consejo Parroquial, algunos concejales de la localidad y el alcalde, José Alberto Armijo. 

Tras un tiempo de oración ante el Santísimo, el prelado dirigió unas palabras a la comunidad y salió del templo, acompañado por el párroco, Francisco Javier Velasco del Pozo, para visitar a un matrimonio que «hasta que le llegó la edad y la enfermedad han estado ayudando a todos los sacerdotes que han pasado por la parroquia», explica el párroco. El Sr. Obispo les agradeció su dedicación con cariño. 

También tuvo tiempo para dedicar a los niños que que preparaban los cantos para la Eucaristía, administrar el sacramento de la penitencia a cuantos fieles se acercaron a recibirlo y participar en la asamblea parroquial, dedicando palabras de «aliento para seguir en el camino de la evangelización desde los niños, hasta los más mayores», recuerda el párroco. 

Para concluir la Visita, el templo, abarrotado de fieles, acogió la celebración de la Eucaristía, en la que D. Jesús «bendijo el nuevo Sagrario de la parroquia, que ha sido posible gracias a la colaboración desinteresada del dorador y el pintor de la puerta, en la que se representa al Buen Pastor», explica Francisco Javier. 

Al final de la celebración litúrgica, el Sr. Obispo bendijo a los niños y dedicó un tiempo a dialogar con la comunidad parroquial y con el párroco y el diáono Álvaro López Cardosa, que se encuentra colaborando este año en la parroquia. 

«Agradecemos la visita del Obispo y del diácono Pepe, seguro que la alegria que inundó a la parroquia ese día dará sus frutos», concluye el párroco. 

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