NoticiaYo, con mi Catedral El tejado de la Catedral, una obra de todos y para todos Publicado: 01/08/2023: 5962 Intervención El 30 de junio se reabrió oficialmente la obra de la Catedral, 240 años después de su interrupción. Una iniciativa que ha unido a toda la comunidad católica malagueña y que se abre a la ciudad entera. Como muestra de ello, un grupo de sacerdotes, religiosos y seglares manifiestan unánimes su apoyo a este proyecto emblemático y su deseo de que pronto sea una realidad La obra del tejado a dos aguas de la Catedral es la solución de las cubiertas propuesta por Ventura Rodríguez en 1764 y que permitirá ahora acabar con el mayor problema de conservación del templo: las humedades y filtraciones que ponen en peligro tanto al monumento como a las personas que lo visitan. El sacerdote Manuel Jiménez, párroco de Los Boliches, manifiesta su alegría a este respecto: «Siempre que voy a la Catedral elevo los ojos para admirar el precioso techo. Y siempre me surge la misma inquietud: “Ojalá algún día se puedan quitar las redes de protección porque ya no haya peligro de desprendimiento y podamos disfrutar de nuestra Catedral en todo su esplendor”. Pues ese día ha llegado: con la buena noticia de la obra, todos los malagueños podremos sentir que esa casa de todos va a seguir siéndolo por muchos siglos más. Nosotros la recibimos de aquellos que trabajaron y aportaron sus recursos y ahora es responsabilidad nuestra. No hace falta que se escriban en las paredes: con nuestra aportación económica, nuestros nombres estarán por siempre, mirando al cielo y protegiendo el suelo, en ese tejado que preservará el templo y lo conservará para el futuro». La Hermana Ruth es religiosa de la comunidad de auxiliares parroquiales de Cristo Sacerdote que atiende la Catedral desde hace más de 25 años. Ella es testigo de excepción del «gran problema generado por la falta del tejado que ha venido provocando toda clase de fisuras, goteras y desprendimientos que, nosotras y el personal del templo, advertimos en el día a día de nuestro trabajo». Destaca «el empeño y dedicación que, desde que me encuentro en Málaga, ha desarrollado el Cabildo para subsanar este problema». La religiosa se congratula por el comienzo de las obras afrontando «las molestias que se puedan presentar durante su transcurso con toda la ilusión de saber que, una vez concluidas, contaremos con una Catedral que lucirá más bella y segura». También el mundo cofrade malagueño ha apoyado con entusiasmo esta obra, destacando las aportaciones económicas realizadas por la Agrupación de Cofradías de Semana Santa de Málaga y, en particular, algunas hermandades de Pasión o la Hermandad de la Victoria. Tomás Galiana, recién elegido como hermano mayor del Sepulcro (Málaga), afirma que, en este proyecto, «los cofrades debemos jugar un papel esencial», pues «las estaciones penitenciales están unidas a este lugar sagrado y de encuentro cristiano». Sumarse al apoyo a esta obra histórica debe ser, para Galiana, una muestra de «nuestro compromiso como cofrades, siempre a la vanguardia en la protección y difusión de nuestro patrimonio». Y es que, como recuerda el canónigo, también delegado diocesano de Cáritas y párroco de Santo Domingo, Antonio Collado, «nuestra Catedral de Málaga es, en primer lugar, un gran legado cultural que generaciones anteriores a la nuestra construyeron, embellecieron y cuidaron. Ese esfuerzo, hoy, nos permite a nosotros disfrutar de este bello y emblemático edificio. También es un símbolo religioso que invita a todos los visitantes de cualquier credo o cultura a descubrir la presencia de lo sagrado y les recuerda que Dios ha puesto su tienda entre nosotros y que el hombre y la mujer de nuestro tiempo no caminan solos. Para los católicos, es la Iglesia madre, desde donde el pastor de la Diócesis ejerce uno de sus ministerios más sagrados, el de la enseñanza de la fe. Tiene en ella su cátedra, de ahí le viene el nombre. Y para todos los malagueños es una seña de identidad de esta “Ciudad del Paraíso y de la Luz” que tiene en nuestra Catedral un verdadero Edén religioso, cultural y artístico que merece la pena ser conservado». Desde el ámbito educativo, la directora del Colegio Diocesano La Presentación, Laura Berrocal, insiste en este aspecto: «es deber de todos conservarla y cuidarla para que todas las generaciones puedan disfrutar de ella. Es muy importante que el alumnado de toda la provincia pueda conocerla, estudiarla y admirarla; que los niños y niñas de Málaga puedan saber lo que hubo y lo que hay», por lo que invita a los centros educativos de la diócesis «a que tengan iniciativas para recaudar dinero para la conservación de nuestro monumento más preciado». Este llamamiento lo secunda también desde el ámbito de las asociaciones y movimientos Gregorio Chamorro, presidente de la Adoración Nocturna Española: «Tenemos que animarnos todos, colaborar económicamente y con generosidad. Es el templo de todos y nos necesita a todos». Y propone acciones concretas: «¡Qué alegría te dará cuando pienses que esas cervezas que no tomaste, ese viaje al que renunciaste o ese coche viejo que apuraste un añito más para dar un dinero, se han convertido en unos ladrillos, en unas tejas para poder decir a tus descendientes “yo allí puse un par de tejas”! No olvidemos que muchos “pocos” hacen mucho». Por su parte, Alfonso Bravo, feligrés de San Gabriel en Málaga capital, se convierte en portavoz de los fieles de las parroquias, afirmando que «como cristiano y malagueño estoy orgulloso de nuestra ciudad y de nuestro templo principal, que es muy importante desde el punto de vista religioso y arquitectónico. Por eso es necesario y justo tomar conciencia y contribuir a este proyecto que hemos heredado y que seguirán heredando las generaciones venideras».