En palabras del delegado de Ecumenismo, el sacerdote Rafael Vázquez, este encuentro pretende «dar un testimonio público que manifieste la alegría de nuestra fe en Cristo Resucitado. Cada una de las confesiones celebra la Pascua junto a sus respectivas comunidades, sin embargo, esta celebración es común para todos los creyentes en Cristo. Nos uniremos para manifestar juntos al mundo que Cristo es luz y esperanza para la humanidad. Es un mensaje común de todas las confesiones cristianas para un mundo marcado por el dolor, por la guerra, por la violencia. Juntos queremos decir: ¡la muerte no tiene la última palabra, Cristo y la vida que Él nos ofrece es la Palabra definitiva! Nos uniremos en un clima festivo, en el que participarán coros de las distintas Iglesias, para profesar juntos la fe que nos une, expresando así la alegría de la Resurrección».

Un paso más

La idea surgió el pasado noviembre en el encuentro que los pastores de las distintas confesiones celebran desde hace años. «Queríamos dar un paso más en el camino ecuménico. Hay muchas cosas que podemos hacer juntos. Tenemos que salir de nuestros esquemas tradicionales y ser valientes para crear más vínculos de fraternidad. Este encuentro es un avance en el camino ecuménico que las Iglesias vienen realizando en Málaga, que ven la necesidad no solo de reunirse para pedir por la unidad en la Semana de Oración de enero, sino que manifiesta esta unidad ya existente bajo una misma fe en el
Resucitado».