NoticiaBlanco sobre Negro Juan Manuel Báez: «Rezo para saber amar» Juan M. Báez Zambrana Publicado: 15/07/2019: 22598 Entrevista al sacerdote Juan Manuel Báez Zambrana, nacido en Málaga en 1978 y ordenado en 2004. ¿Qué es lo más inteligente que se puede hacer en esta vida? Ser libre. ¿A vivir se aprende? No se puede aprender lo que no depende de ti ¿Y a ser sacerdote? Se aprende y se lucha cada día por ser el sacerdote al que Jesús te llama a ser. ¿Crees que sabes vivir? Creo que sé disfrutar de la vida ¿Has sufrido alguna crisis vital? Crisis existencial no. Temores y dudas, sí ¿En qué o en quién te apoyaste cuando la sufriste? En Aquel que me sostiene y me consuela en toda circunstancia. Y en aquellos que Dios, pone en mi camino como acompañante espiritual. ¿Cuál crees que es tu gran aportación a la Diócesis de Málaga? Amarla, sufrir por y con ella y servirla a pesar de mis fallos. ¿Cuál es el mayor desafío al que se enfrenta nuestra iglesia local hoy? Ser libre para anunciar a Cristo, astuta para llevar esperanza a los hombres y mujeres de hoy. Y vivir en perspectiva del aggiornamento del concilio Vaticano II. ¿El peor pecado con el que has tenido que lidiar? Creer que tengo la razón en todo. ¿Qué cosas te importan de verdad y qué cosas no te importan nada? Me importa ser fiel. No me importan los juicios humanos. ¿Quién dice la gente que eres tú? Pregúntale a la gente. ¿Te gusta complicarte la vida? Procuro que la vida no sea complicada. ¿Cómo te gustaría morir? Deseando ser santo. ¿Qué le dirías a quien se esté planteando si Dios lo llama para ser sacerdote? Que se deje amar por Jesús, que no se cierre a la infinita ternura de Dios ¿Qué preguntarías a un joven que se plantea su vocación sacerdotal? ¿Quieres ser perfecto? ¿Podemos decir que hemos venido y estamos aquí para ser felices? Está en nuestro ADN. Es lo que Dios quiere para nosotros. ¿Qué te preguntas? Mejor ¿qué me pregunta a mí Jesús? ¿Quién es Jesucristo para ti? Poéticamente hablando lo que la primavera a la flor, lo que el viento a la vela el barco. ¿Cómo te ves con el paso del tiempo? ¿Has mejorado como los buenos vinos? Más que con el vino me identifico con la barrica, dispuesta a acoger más amor de Dios, para asentarlo en mi vida. ¿Qué es lo más complicado que vives como sacerdote? La burocracia. ¿Dónde encuentras la felicidad? En el Sagrario y en la propia entrega. ¿Rezas para tener éxito? Rezo para saber amar ¿Te preocupa cómo vive la gente? Me preocupa que la gente viva sin esperanza; como si Dios no existiera. Están perdiéndose lo mejor de la vida ¿Eres un sacerdote dócil? Me considero un sacerdote obediente. ¿Qué es para ti el tiempo? Un camino a la eternidad. ¿De qué te arrepientes o tiene remordimientos? De mis pecados que son muchos, remordimiento de nada. ¿Cuál consideras la virtud más sobrevalorada? La no virtud. ¿Cuál es tu viaje favorito? Ir cada día al altar. ¿Pequeños placeres? Una buena barbacoa con amigos. Hay quien sugiere que la soledad del cura puede llegar a ser insoportable, ¿has vivido la soledad como un calvario alguna vez? Nunca me he encontrado sólo, y las soledades del alma Dios las llena en abundancia. ¿Un olor que recuerdes? El petricor en el jardín de mi casa. ¿Un perfume que se cautive? Un jardín de rosas al amanecer ¿Tu flor favorita? Las calas. ¿La palabra más hermosa del diccionario? El otro día leía una palabra que no conocía y me llamó la atención: bonhomía. ¿El regalo más bello que te ha hecho ser presbítero? Experimentar en la gente lo que hace el amor de Dios y poder hacerlo cada día presente en la Eucaristía A estas alturas del partido ¿volverías a ser sacerdote? Volvería a ser lo que Dios quiere de mí. Chaplin, como casi todos, empezó diciendo que la vida era maravillosa y acabó diciendo que no tenía ninguna gracia. ¿Qué le responderías? Solo Dios da chispa y humor a la existencia, desde el nacer hasta la muerte. Quizás no te has encontrado con Él