NoticiaEntrevistas Francisco J. Pérez: «Lo que hagamos ha de ser con la alegría de ser enviados» Publicado: 11/05/2015: 15244 Francisco Javier Pérez Gámez, 44 años, trabajador social, casado y con tres hijos. Es Responsable del Área de Formación y Voluntariado de Cáritas Diocesana y nos habla del Encuentro Diocesano que se celebra el día 16 de mayo en Fuengirola ¿Cuál es la finalidad de este encuentro? Principalmente se persigue que sea un momento de encuentro de todos los miembros de Cáritas, donde exista la posibilidad de celebrar, convivir y compartir. Se pretende que sea un momento formativo, lúdico y celebrativo, que viene a complementar otros espacios ya existentes en Cáritas como son las jornadas de formación y la asamblea. Este año se celebra fuera de la capital, ¿por algo especial? Desde hace ya varios años, como signo de la presencia de Cáritas en toda la Diócesis, se optó por celebrar el encuentro de miembros de Cáritas fuera de la capital, ya que las jornadas de formación y la asamblea se desarrollan en Málaga. Es una forma de descentralizar y acercar los momentos diocesanos de Cáritas a los distintos arciprestazgos de la provincia, de darle protagonismo al arciprestazgo que nos acoge y de mostrar al resto el trabajo que en él se realiza. La Comisión Arciprestal de Fuengirola-Torremolinos está trabajando con mucha ilusión para organizar este encuentro y para recibir a los miembros de Cáritas de todos los rincones de la diócesis. ¿Quiénes están invitados al acto? ¿Sólo los miembros de Cáritas? Principalmente es un encuentro dirigido a las personas que desempeñan su labor pastoral en Cáritas, aunque obviamente abierto a todo el que quiera asistir. De hecho ya hay varias personas que nos han consultado si pueden asistir por la tarde al concierto-oración de IXCIS. Sin duda alguna, las puertas de Cáritas, de la Iglesia, están abiertas a todo el que quiera compartir este momento. Es un día de convivencia con otros miembros de Cáritas; para compartir experiencias, dificultades e ilusiones, para sentirnos todos unidos en una misma misión. Un día para celebrar la fe que nos une y nos impulsa en nuestra tarea y volver fortalecidos para continuar con nuestra labor con los más necesitados. ¿Por qué el lema: “Llamados por el Señor a servir con alegría”? El seguimiento del Señor pasa irremediablemente por el servicio a los demás, y especialmente a los que peor lo pasan. Y esta misión ha de hacerse con alegría, ha de realizarse, como dice el papa Francisco, sin “una continua cara de funeral”. En ocasiones, no podremos resolver todo lo que se nos presenta, ni solucionar todas las situaciones, pero aquello que hagamos ha de ser con el amor y la alegría de ser enviados por el Señor a este servicio.