DiócesisComentario al Evangelio ¿RECHAZO O ACOGIDA? por Miguel Ángel Criado. Comentario al evangelio del Domingo XXVI del Tiempo Ordinario Publicado: 22/09/2020: 12287 Miguel Ángel Criado, profesor de los Centros Teológicos, ayuda a profundizar en el evangelio del Domingo XXVI del Tiempo Ordinario. Una de las cuestiones que ha centrado la atención de numerosos teólogos en las últimas décadas ha sido la reflexión sobre las actitudes personales y las disposiciones espirituales de los individuos que nos abren o nos cierran a la posibilidad de la fe cristiana. Con la parábola de los dos hijos enviados por el padre a trabajar en la viña, Jesús explica el rechazo de los líderes religiosos de Israel y la acogida del Evangelio por parte de los pecadores que se convierten. El hijo que dice sí y no obedece representa a aquellos que conocían a Dios y seguían su Ley, pero no quisieron escuchar la voz de Dios a través de Juan Bautista y rechazaron a Cristo como el único salvador de sus vidas. El hijo que dice no y obedece representa a los que en un tiempo vivían fuera de la Ley, sin embargo, ante la presencia de Jesús, se arrepintieron, se convirtieron de su cerrazón y se abrieron al don de la salvación del Evangelio. J. H. Newman afirmaba que el rechazo de la fe brota a menudo “de un fallo del corazón, no del intelecto”. Si miramos en nuestro interior, descubrimos que en nuestro corazón hay un poco de los dos hermanos. Que en nuestro camino de fe andamos a veces entre la acogida y el rechazo, la fe y la incredulidad. Hoy, el Señor nos invita a descubrir las razones del corazón que bloquean nuestra relación con Él. A desenmascarar aquellas experiencias humanas que nos impiden edificar la vida desde Dios y no solo desde mi yo. Para Jesús las palabras no cuentan, sino las obras y los hechos de conversión y de fe. Diócesis Málaga @DiocesisMalaga Más artículos de: Comentario al Evangelio EL SACO ROTO, por Ana Medina. Comentario al evangelio del Domingo XXVII del Tiempo OrdinarioLLAMADOS A LA VIÑA, por Guillermo Tejero. Comentario al evangelio del 20 de septiembre Compartir artículo Twitter Facebook Whatsapp Enviar Imprimir