RONDA (LUNES 4 DE ABRIL). Mario Rojas, 18 años, de la parroquia de San Rafael, en Ronda. «El encuentro que hemos vivido ha sido muy bonito. Nunca se sabe cuándo volverá a recorrer toda España y que venga a Ronda es un orgullo para nosotros. Por la mañana tuvimos oración y catequesis con dos colegios y, por la tarde vigilia en Santa María la Mayor. La gente estaba muy contenta. Antes de preparar este encuentro no sabía ni que existía esta imagen y me ha gustado mucho poder conocerla».

ANTEQUERA (MARTES 5 DE ABRIL). Ana Rodríguez, 17 años, pertenece a la parroquia de San Miguel, de Antequera: «El icono es perfecto para representar a la juventud ya que eso es lo que transmite la cara de la Virgen: una cara joven, que disfruta de la vida. Transmite además paz, con un aire de modernidad, lo que significa que la Iglesia es también joven y sabe adaptarse al paso del tiempo».

FUENGIROLA (MIÉRCOLES 6 DE ABRIL). Vanesa Fernández, 33 años, responsable de Juventud del arciprestazgo Fuengirola- Torremolinos. «Para nosotros, tener el icono de la Inmaculada Joven ha sido una oportunidad de tener más presentes los valores cristianos y a la Virgen María como modelo a seguir. En este Año de la Misericordia es una oportunidad para demostrar el amor hacia nuestras madres y hacia los más necesitados. Ha sido una experiencia muy bonita, que se vive pocas veces en la vida».

VÉLEZ-MAÁLAGA (JUEVES 7 DE ABRIL). Daniel Gutiérrez, 18 años, de la parroquia de San Juan Bautista y Sta. María de la Encarnación, de Vélez- Málaga y seminarista menor. «El Señor tiene un plan para cada uno de nosotros y por ello, debemos dar nuestro “Sí” como hizo María, aunque nos cueste, porque merece la pena».

MÁLAGA (VIERNES 8 DE ABRIL). Vanesa Fernández, 33 años, responsable de Juventud del arciprestazgo Fuengirola- Torremolinos. «Para nosotros, tener el icono de la Inmaculada Joven ha sido una oportunidad de tener más presentes los valores cristianos y a la Virgen María como modelo a seguir. En este Año de la Misericordia es una oportunidad para demostrar el amor hacia nuestras madres y hacia los más necesitados. Ha sido una experiencia muy bonita, que se vive pocas veces en la vida».