DiócesisComentario al Evangelio

Comentario al evangelio del Domingo XIV del Tiempo Ordinario, por Ana María Medina

Ana Medina en el plató de TRECE
Publicado: 29/06/2021: 4601

La profesora de los Centros Teológicos Ana María Medina ayuda a profundizar en el evangelio de este domingo (Marcos 6, 1-6).

La Palabra de este domingo nos cuenta lo que bien podríamos definir como una etapa fracasada en la predicación de Jesús.

El pasaje del evangelio nos muestra el rechazo vivido por Jesús en su propio pueblo. Es fácil comprender que fue un gran deseo el que le hizo llevar la Buena Nueva a sus seres más cercanos, a sus parientes y vecinos, a aquellos que le habían visto crecer y con quienes había compartido gran parte de sus 30 años de vida. Ansioso de predicar con palabras y obras al Padre, Jesús recibe, sin embargo, incredulidad y escándalo. “¿De dónde saca todo eso? ¿No es éste el hijo del carpintero?” La Escritura nos dice que se extrañó de esa falta de fe y que tuvo que marcharse sin poder hacer allí ningún milagro.

Me pregunto cuántas veces me sitúo yo en el papel de los vecinos de Nazaret. Es fácil caer en la tentación de ignorar la presencia de Dios en aquellos que tenemos más cerca, de quienes conocemos defectos y debilidades. Y sin embargo, es también, y sobre todo, en lo pequeño, en lo cotidiano, donde Él nos habla cada día.

Del mismo modo, como seguidores de Cristo, la frustración vivida en su pueblo puede iluminar también nuestras propias decepciones. Estamos llamados a llevar al Señor como “custodias vivas” a nuestros ambientes, a quienes comparten vida con nosotros, aún a riesgo de que nuestras obras y palabras no encuentren en ellos la mejor audiencia. A Él también le pasó. No nos desanimemos.

Ana María Medina

Periodista de la diócesis de Málaga

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