D. Jesús Catalá fue recibido en dos lugares. La primera bienvenida tuvo lugar frente al Ayuntamiento, en lo que los iznateños llaman la Puerta La Martina. Allí las autoridades civiles y el consejo parroquial saludaron al Sr. Obispo y le mostraron el bello paisaje que se contempla desde esta plaza, donde se hicieron varias fotos. 

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Después, la comitiva se dirigió al templo parroquial compartiendo con el prelado malagueño la situación actual y las características del pueblo. En la entrada del templo, «D. Jesús recordó a los fieles el bautismo y los bendijo con agua bendita, tras besar el signo del amor cristiano, la cruz», explica el párroco.

Después de un tiempo de oración personal ante el Sagrario, los miembros del Consejo parroquial, las autoridades civiles y un grupo de fieles que ya se encontraban en el templo rezaron juntos la hora intermedia. El párroco dio la bienvenida al Sr. Obispo y dedicó unas palabras a todos los presentes subrayando que «la comunidad lo recibe desde la fe, como un sucesor de los Apóstoles, como el pastor que viene a fortalecer y animar la fe, tal como lo hacían los apóstoles con las primeras comunidades cristianas».

En el programa de la Visita estaba previsto que el prelado malacitano se acercara a visitar a algunos enfermos a sus hogares pero «por diversas circunstancias no fue posible y algunos de ellos prefirieron con gran esfuerzo asistir a la celebración con toda la comunidad».

D. Jesús dedicó un tiempo a administrar el sacramento del perdón a cuantos feligreses se acercaron y después, todos juntos, comenzaron la celebración de la Asamblea. Fue una experiencia muy propicia «para el diálogo fraterno si bien con la típica vergüenza a la hora de alzar la mano y preguntar. “Es que nos gusta escucharlo, más que hablar nosotros” expresaba Conchi, una de las fieles. Sin embargo, hubo preguntas y también buenas respuestas especialmente por parte de los niños de catequesis. Uno de ellos (Hugo) ante la pregunta de don Jesús sobre ¿qué le dirías a quien no practica la fe, cómo lo convencerías?, Hugo levantó la mano y respondió “Yo le diría que Jesús te hace feliz”», explica Daniel Ceratto. 

El coro rociero del pueblo “Pura Cepa” participó con sus cantos también en la Eucaristía, centro de la vida cristiana y de la Visita Pastoral; «y los niños que recibirán pronto la comunión por primera vez también participaron con las preces y una oración postcomunión que ya es clásica en la parroquia: la plegaria del padre Pío “quédate con nosotros”», explica el párroco.

Antes de la bendición, el párroco agradeció, en nombre de todos los fieles, esta visita de D. Jesús expresando que «nos ha dejado mucho trabajo, muchos retos para vivir nuestra fe y, por tanto, será necesario que venga otra vez, a verificar cómo lo hemos cumplido».

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Tras la Santa Misa, tuvo lugar un pequeño acto en la plaza de la Virgen, junto al templo parroquial, en el que el Sr. Alcalde y su equipo de gobierno entregaron varios presentes típicos del pueblo. Al agradecerlos, «D. Jesús nos expresó que, desde el primer momento de su llegada a Iznate, se había sentido como en casa y felicitó a todos por el espíritu de alegría y hospitalidad, animándonos a vivir siempre en la fraternidad, dejando de lado las diferencias», concluye el párroco.

La jornada concluyó con un ágape al aire libre en el que se pudieron degustar algunas ricas tapas preparadas por una empresa de catering del propio pueblo.