NoticiaVisita Pastoral «Somos una comunidad acogedora que vive la alegría de la fe» Publicado: 11/12/2023: 13456 Santa María del Mar La parroquia de Santa María del Mar, en Torremolinos, acogió al Sr. Obispo en la Visita Pastoral que viene realizando al arciprestazgo de Fuengirola-Torremolinos. En el segundo domingo de Adviento, D. Jesús Catalá bendijo el Belén parroquial. La Visita comenzó con la acogida de la comunidad parroquial y unas palabras de la secretaria del Consejo Pastoral, Belén Ruiz: Querido D. Jesús. Ante todo, queremos darle las gracias por dedicarnos hoy el día, pues sabemos que su agenda es intensa y su tiempo para nosotros es un regalo. Muchas gracias. En nombre de toda la comunidad de Santa María del Mar de Torremolinos le doy la bienvenida a nuestra parroquia que sentimos como nuestra casa, y que también es suya, en esta gran familia que conformamos la Iglesia. Esa Iglesia que rema junta, al unísono, unida y animada por los elegidos de Dios, los pastores que nos acompañan. Dios les bendiga. Hoy quisiera presumir de esta mi familia parroquial. Sepa usted, D. Jesús, que somos una comunidad acogedora, que vive la alegría de la fe, y que sale al encuentro del hermano. Una comunidad que se ilusiona y apasiona con las actividades que se hacen aquí y en la Diócesis, que se implica con las necesidades del hermano y que confía y espera siempre en Dios, como su sierva la Virgen María, ejemplo a seguir. Esperamos que disfrute hoy de la Visita, nosotros seguro que sí porque le esperamos con entusiasmo. Reciba, así pues, nuestro más caluroso abrazo en Cristo de toda esta comunidad de Santa María del Mar, siéntase como en casa, ¡bienvenido! Tras la acogida y un momento de oración ante el Santísimo, el Sr. Obispo, acompañado de los sacerdotes y el diácono de la parroquia, visitó a varios enfermos de la comunidad. De regreso al templo, dedicó un tiempo a la confesión de cuantos fieles se acercaron y, en la celebración de la Eucaristía bendijo el Belén parroquial, que ya estaba dispuesto. Durante la asamblea parroquial, los feligreses pudieron plantear al prelado cuantas cuestiones desearon y, al terminar, compartieron un ágape en los salones de la parroquia. Antes de marcharse del templo parroquial, D. Jesús Catalá rezó un responso por los difuntos, en el columbario.