Los profesionales de los medios han recordado especialmente a los compañeros fallecidos en el desempeño de su profesión, número que ascendió a 63 en todo el mundo en el pasado 2005, según datos de la ONG Reporteros sin Fronteras.

En la Santa Misa se ha pedido también por los periodistas que sufren persecución en la búsqueda de la verdad y por aquellos que sufren las consecuencias de la precariedad laboral que afecta de modo especial a esta profesión.

D. Antonio Dorado, en su homilía, ha retomado el mensaje del Papa Benedicto XVI para la Jornada Mundial de la Paz, recordando a los periodistas que la verdad es el camino para la paz, y que en su trabajo diario deben convertirse en defensores de la paz “por encima de las ideologías”.

El Sr. Obispo ha invitado a los periodistas católicos a evangelizar en sus lugares de trabajo y a defender de modo especial a la familia, núcleo de la sociedad. Tras la Eucaristía, los profesionales de los medios han compartido un ágape en la Casa Sacerdotal en compañía de D. Antonio.

Algunas fotos de esta celebración las pueden ver en este enlace.