Noticia La Diócesis se une a la oración por la paz de hoy domingo Publicado: 06/06/2014: 16617 El Sr. Nuncio de Su Santidad, Mons. Renzo Fratini, ha remitido una carta al Presidente de la Conferencia Episcopal, en la que invita a todos los obispos, religiosos y fieles cristianos a participar espiritualmente en el encuentro de oración, para pedir a Dios el don de la paz, que tiene lugar en el Vaticano hoy domingo. Shimon Peres y Mahmoud Abbas se han encontrado en el Domus Santa Marta para rezar juntos por la paz Dicho encuentro ha sido propiciado por la invitación que el Papa Francisco dirigió a los Presidentes Shimon Peres y Mahmoud Abbas durante su viaje a Tierra Santa y contará también con la presencia de Su Santidad Bartolomeo, Patriarca de Constantinopla. En este sentido todos los sacerdotes y fieles están llamados a unirse espiritualmente a esta oración desde sus comunidades cristianas respectivas. UNA PAUSA EN EL CONFLICTO POLÍTICO El encuentro que ha sido esta tarde a las seis y cuarto de la tarde en los Jardines del Vaticano ha sido presentada hoy como una "pausa" en el conflicto de Oriente Medio en la que se "invoca" la paz. El custodio de Tierra Santa, el franciscano Pierbattista Pizzaballa, quien se ha ocupado de organizar el viaje de ambos líderes y sus delegaciones, resaltó a la prensa en el Vaticano que la ceremonia sin precedentes del domingo se entenderá como "una pausa en la política". "El deseo del papa es el de hacer una pausa en la política, elevarnos y mirar en alto y desde arriba darnos cuenta de lo que ocurre en Tierra Santa", explicó Pizzaballa. El franciscano comentó que no hay que creer que, tras ese acto, "estallará la paz", pero destacó que es un gesto fuerte "para dar un respiro a la política e impactar sobre la opinión publica". El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, y el custodio de Tierra Santa han ofrecido los detalles de esta ceremonia, que se produce tras la invitación a rezar por la paz que el papa Francisco hizo a los dos líderes durante su viaje a Tierra Santa a finales de mayo. El papa les invitó a su "casa" para que orasen y el Vaticano ha elegido un lugar neutro, al aire libre y sin connotaciones religiosas de ningún tipo para organizarlo. INVOCACIÓN POR LA PAZ El espacio para esta "invocación por la paz" ha sido un idílico rincón de forma triangular de los Jardines Vaticanos, rodeado de frondosos arbustos y desde el que se divisa la cúpula de la Basílica de San Pedro. No se trata, puntualizó el Vaticano, de una "oración interreligiosa" sino que cada uno reza según su confesión. "No se reza juntos sino que se está juntos para rezar", resumió Pizzaballa sobre el sentido del acto. Por esto, la ceremonia se ha desarrollado en tres actos, el primero dedicado a la comunidad judía, el segundo a la cristiana y el tercero a la musulmana. En cada uno de esos actos se reza una oración de agradecimiento por "la Creación", donde se resalta que "todos somos hermanos"; después se pasa a pedir "perdón por los pecados cometidos" y finalmente llega la "invocación" de la paz. La música ha estado interpretada por orquestas en vivo y espacios para recogerse en meditación y se han leido textos en hebreo, inglés y árabe. El papa, sentado durante el acto entre los presidentes de Israel y la Autoridad Nacional Palestina, tiene previsto terminar esta ceremonia con un discurso, sin carácter político, aseguraron. Los tres después realizan un "gesto de paz" con un apretón de manos o un abrazo y plantan juntos un olivo. El acto h dado comienzo con la llegada de los presidentes a partir de las 18.15 hora local (16.15 GMT) a la Domus Santa Marta, la residencia del Vaticano donde vive el papa argentino. El pontífice ha salido a recibir primero a Peres y después a Abás y ha mantenido unos minutos de reunión por separado con cada uno. Posteriormente, los tres se han encontrado en la recepción de Santa Marta y se han trasladado al lugar del evento junto con el patriarca ecuménico y líder de la Iglesia ortodoxa, Bartolomé I, quien también ha sido invitado a esta jornada de oración. Tras la ceremonia, el papa y los presidentes se reunen privadamente en la sede de la Academia de las Ciencias, a pocos pasos del lugar del evento.