NoticiaTestimonios Ana María Rodríguez, se confirma en Frigiliana: «Cuando el obispo me imponga las manos, rezaré para convertirme en mejor persona» Publicado: 20/02/2014: 7666 • Confirmaciones «Para mí, recibir este Sacramento es algo tan importante que no puedo expresar con palabras la emoción que siento». Así se expresa Ana María Rodríguez, una joven de 26 años que este domingo se confirmará en la Iglesia de San Antonio de Padua de Frigiliana junto a un grupo de más de 40 personas. Ana lleva un año formándose para recibir la confirmación. «El curso me ha reafirmado en la fe y me ha hecho mejor persona. Es una de las cosas más importantes que he hecho en los últimos años. ¡Leía la Biblia y cada vez descubría más cosas!». Joven, cofrade y emprendedora –con 26 años está al frente de una tienda de ropa– asegura que la fe constituye la razón más importante de su día a día: «Lo primero es el Señor; siento que me guío mucho cuando rezo. él me ayuda y está conmigo. Hace posible que las cosas me salgan como espero. Este domingo, cuando el obispo me imponga las manos, rezaré para convertirme en mejor persona. Rezar me ayudará mucho». Mientras se preparaba para recibir el Sacramento de la Confirmación, Ana cuenta que sufrió uno de los episodios más difíciles de su vida, la pérdida de su abuela materna: «Murió hace cuatro meses, era un pilar importantísimo en mi familia, con ella yo iba a misa todos los domingos cuando era niña, y ahora pasaba mucho tiempo con ella. Yo estaba muy triste, tan solo la catequesis me ha ayudado a superar un momento tan duro». Ana no puede reprimir las lágrimas al hablar de su abuela Nieves: «Ella estará en mi corazón en el momento en que me confirme». Por eso, este domingo, Ana María entrará en la iglesia de San Antonio bien acompañada: «Estarán conmigo mis padres, mi hermano, mis tíos y, por supuesto, quien será mi padrino de confirmación, Emilio Platero. Emilio es profesor de la Fundación Santa María de la Victoria y cofrade desde hace más de 40 años en Frigiliana. Le tengo como modelo de persona cristiana, porque vive profundamente arraigado a la fe». Esta joven de Torrox también habla con amor de sus padres: «Mi familia ha sabido transmitirme, desde pequeña, los valores de la fe cristiana. Eso es lo mejor que han podido hacer por mí». Ana conoce a la mayor parte del grupo que recibirá la confirmación con ella. Algunos son familiares y otros conocidos del pueblo. «Van con tanta ilusión como yo», detalla. Y es que Ana, aunque nació y vive en Torrox, tiene una gran vinculación con Frigiliana, el pueblo de su padre. De hecho, desde hace 15 años –siendo adolescente- es miembro de su Agrupación de Cofradías: «Soy jefa en la Junta de Gobierno de Nuestro Padre Jesús Resucitado. Además estoy en Nuestra Señora de la Soledad y Nuestro Padre Jesús Nazareno»- resume feliz. «Me gusta ayudar en todo lo que pueda para las procesiones y estoy muy orgullosa de pertenecer a estas cofradías. Tengo que agradecer a mis compañeros lo bien que se han portado conmigo, al ser una de las más jóvenes que ha entrado en la Junta de Hermanos», dice Ana. Su pasión por el mundo cofrade ocupa una parte importante de su tiempo libre, que no es mucho debido a su horario cotidiano como dependienta. Para Ana, la catequesis ha sido como un balón de oxígeno, su válvula de escape: «Doy las gracias a mi grupo de catequesis y a mi párroco, Don Antonio Guzmán, por compartir con ellos esta experiencia». Autor: Ana Oñate @anatecam