NoticiaEconomía Hoy, la Iglesia rinde cuentas Publicado: 10/11/2011: 3676 Apunten: 15 millones de euros. Ése el presupuesto que la diócesis de Málaga baraja para el sostenimiento de su intensa actividad religiosa y social en toda la provincia de Málaga (capital, pueblos y hasta aldeas) y Melilla. Pero, ¿cuánto son 15 millones de euros? Para que se hagan una idea de lo ajustado de este dinero para tanto como se hace, piensen que en Málaga capital el Ayuntamiento se gasta casi el doble sólo en el área de Bienestar Social (27,5 millones) y que sólo el nuevo edificio de la Gerencia de Urbanismo ha costado en torno a 34 millones, mientras que su presupuesto total para este año es de 259 millones. El presupuesto de toda la diócesis se asemeja al presupuesto de ayuntamientos como el de Benahavís (13 millones de euros para 5.000 habitantes), el de Cártama (13,5 millones para 22.000 vecinos) o el de Manilva (21,5 millones para 14.000 vecinos). En el Día de la Iglesia Diocesana que celebramos hoy, se nos invita a ser conscientes de la importancia de que la comunidad cristiana siga haciéndose presente en nuestra sociedad. Porque la Iglesia está con nosotros en los mejores y en los peores momentos de nuestra vida, acompañándonos, alentándonos, enseñándonos, alimentándonos... Con el lema "La Iglesia contigo, con todos", manifestamos nuestro interés en seguir sosteniendo con nuestro voluntariado y nuestro dinero una labor que es impagable, pero que cuesta dinero llevar a cabo. Las obras, lo más costoso Uno de los capítulos de gastos más importante en la diócesis es el de construcción y rehabilitación de templos. Las obras más importantes que se están llevando a cabo en la actualidad son: nuevos complejos parroquiales en Ronda y Estación de Cártama; y rehabilitaciones en Stma. Trinidad (Antequera), El Borge, Alozaina y San Felipe Neri (Málaga), entre otras muchas. El importe total de las obras en curso, a distribuir en varios ejercicios es de 9,5 millones. COLECTA DEL DÍA DE LA IGLESIA DIOCESANA Este domingo se celebra el Día de la Iglesia Diocesana. En todas las parroquias y comunidades cristianas se realizará una colecta para contribuir con la diócesis. Las cifras de esta colecta en los últimos años son: Año 2008: 87.561 € Año 2009: 89.655 € Año 2010: 71.481 € Las colectas ya no bastan Hasta hace unos años, el sistema de colectas en las misas era suficiente para pagar los gastos que genera la actividad pastoral y asistencial de la Iglesia. Pero se constata que, hoy en día, este sistema debe ser renovado para dar respuesta a la configuración actual de nuestras comunidades cristianas. La cifra de personas que participa con frecuencia en la Eucaristía dominical podría estimarse en torno a un ocho por ciento de la población de la diócesis; es decir, en unas 135.000 personas. Teniendo en cuenta que el importe anual recaudado en las colectas que se llevan a cabo en las parroquias asciende a 2.295.211 euros, resulta que el importe medio por persona y año ronda los 17 euros (un euro y medio al mes). La colecta dominical media en una parroquia malagueña viene a ser de 176 euros. Y de ahí se tiene que pagar la hipoteca o el mantenimiento, la luz, el teléfono, la limpieza, la manutención del sacerdote... Además, algunas colectas no se quedan en la parroquia, sino que ésta hace sólo de intermediaria. La lista completa de estas colectas la tienen en esta misma página, y son expresión de la comunión de bienes dentro la Iglesia. Y es que las colectas tienen un sentido profundo dentro de la Misa, «como ofrenda de nuestra vida, que nos une a Jesús en su entrega, expresión material de la comunión de bienes, testimonio de amor fraterno hacia los necesitados, testimonio de desprendimiento de lo material y continuidad de la tradición comunitaria cristiana». Las comunidades parroquiales han de plantear a los fieles, con sinceridad y transparencia, su situación económica: qué gastos se tienen, qué porcentaje se destina a contribuir con otras necesidades de la Iglesia, cuánto se recauda semanalmente y cuánto sería necesario que cada miembro de la comunidad aportara para sostener los servicios básicos. Pero, ¿y los que no participan en la colecta dominical? Muchos miles de católicos se han alejado de la práctica religiosa, pero acuden a la parroquia a rezar ante una imagen, a llevar a sus hijos a la catequesis o sólo con motivo de ocasiones especiales. Estos católicos valoran la labor de la Iglesia y estarían también dispuestos a suscribir una cuota periódica si se les hiciera ver la necesidad. De hecho, la suscripción puede ser una excelente oportunidad para establecer vínculos más estrechos y animarlos a integrarse más en la parroquia. COLECTAS EXTRAORDINARIAS A lo largo del año, la Iglesia realiza colectas específicas cuyo importe no se queda en la parroquia sino que se destina a otras necesidades. Éstas son: - Infancia Misionera - Campaña contra el hambre - Seminario - Santos Lugares - Clero Nativo - Misión Diocesana - Día de Caridad - Pro orantibus - Óbolo de San Pedro - Pro templos - Domund - Día de la Iglesia Diocesana Asimismo, en muchas parroquias, es habitual que una colecta al mes se destine a atender a personas que vienen a la parroquia a pedir ayuda a través de Cáritas parroquial. Las cuotas son el futuro La Nueva Evangelización requiere nuevas formas de adaptarse a la realidad y necesidades actuales de las parroquias y familias. La domiciliación bancaria de cuotas para colaborar económicamente con las parroquias es el mejor sistema para garantizar su sostenimiento. Resulta cómodo y seguro para los fieles, que no tienen que preocuparse de llevar dinero encima; supone una forma seria de compromiso, pero puede darse de baja o modificarse cuando se desee; y a las parroquias, les garantiza una base para poder seguir ayudando a tantos que necesitan tanto. Unos 2.600 fieles de nuestra diócesis han elegido ya esta opción. Parecen pocos, pero sólo con estas cuotas, la diócesis ingresa 870.000 euros, que es más de la tercera parte de lo que recauda con el sistema de colectas. Y es que la aportación media por persona sube hasta los 27 euros al mes. Para ello, es fundamental el impulso decidido y sin complejos por parte de los sacerdotes para suscitar la respuesta responsable y generosa de los seglares. Artículo publicado en la revista "Diócesis" Autor: diocesismalaga.es