Lee aquí la homilía del Obispo en esta visita

En este caso, la parroquia está de celebración especial con motivo del 50 aniversario desde que se erigió la parroquia como tal. Coincide además en el año declarado por el papa Francisco dedicado a San José, titular del templo, en el 150 aniversario como patrono de la Iglesia universal. 

Con aforo limitado por la normativa COVID, teniendo en cuenta además la buena amplitud del templo, la jornada permitió la presencia de representantes de cada uno de los grupos parroquiales: cofradías de Pollinica y Rocío, y Ecce Homo y Amor, Liturgia, Cáritas Parroquial, Catequesis de Iniciación Cristiana, Catequesis de Jóvenes, grupo scout católico, Pastoral Familiar, y equipo de mantenimiento y limpieza, que recibieron en un primer momento al Obispo a las 16.00 h. en el patio de las instalaciones del templo, encabezados por el párroco Wilfer Darío Alzate Acevedo. 

Tras unas breves palabras de inicio de la jornada, la visita pastoral continuaba desplazándose al domicilio de una persona enferma. Una visita muy especial a Francisco Luis García Caro, gran colaborador de la parroquia como fundador de la Cáritas Parroquial, miembro de la Cofradía "Ecce-Homo" y Amor Vélez-Málaga, catequista de Confirmación de adultos y con un gran servicio prestado en el despacho parroquial. Desde hace meses, un ictus, acompañado de un infarto, le ha impedido seguir con esta encomiable labor por la que el obispo le impuso en la visita la medalla Pro Ecclesia Malacitana en reconocimiento a toda su trayectoria en favor de la Iglesia local, que recibía Paco Luis con tremenda emoción en compañía de su hermana, encargada de cuidarlo. Estuvieron charlando sobre la historia de creación de la parroquia, que el Sr. Obispo recomendó dejar por escrito para que no se pierda esa memoria que queda ahora mismo en las personas que lo fraguaron. Finalmente, se realizó una pequeña oración dirigida por el prelado y en la que Paco Luis recibió el mayor regalo de la visita, la comunión del mismo Jesús Sacramentado. El acto culminó con la imposición de manos. 

La visita se trasladó nuevamente al templo parroquial para iniciar una Asamblea Parroquial presidida por el propio obispo. D. Jesús Catalá incidió a los representantes de los grupos parroquiales en la necesidad de formación, en el cuidado del ámbito litúrgico y el testimonial de cada uno en su vida, siendo coherentes en un mundo cada vez más pagano. 

Seguidamente, D. Jesús se dispuso a celebrar el sacramento del Perdón con algunos feligreses, justo antes de celebrar la Eucaristía en la que se hizo presente uno de los últimos párrocos de San José, D. Antonio Castilla, invitado para esta conmemoración del 50 aniversario, como el resto de párrocos a los que les fue imposible acudir. El párroco Wilfer Alzate, agradeció al final de la Visita Pastoral al obispo su presencia en esta fecha tan especial y una feligresa le hizo entrega de una placa como recordatorio del momento. D. Jesús Catalá concluyó el acto, alentando a que cuando las condiciones lo permitan, ojalá en verano, se celebre este 50 aniversario de la parroquia a lo grande. 

El Obispo se mostró en todo momento muy cercano con los miembros de la parroquia. Al final, los grupos de la parroquia se realizaron una serie de fotos de recuerdo con el Obispo.